Una protesta laboral de los funcionarios de la Policía Local de Pontevedra llevó al alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, a suspender hasta en dos ocasiones el pleno municipal celebrado este martes. Los agentes impedían con sus comentarios y chascarrillos el normal desarrollo del debate.

Tras la segunda suspensión del pleno, originada por las interrupciones de los funcionarios, el regidor ordenó a los agentes de Policía que se encontraban en servicio que identificasen a quienes hacían comentarios e interrumpían la sesión desde el patio de butacas. Tras este incidente, nuevamente protestado por los funcionarios, éstos decidieron abandonar el Teatro Principal en el que se celebran los plenos de Pontevedra, permitiendo así la continuidad de la sesión con normalidad.

El motivo de la protesta es una reivindicación salarial.