La Guardia Civil, en un servicio coordinado con el Servicio de Guardacostas de la Xunta de Galicia, se incautó ayer de cerca de 4 toneladas de anchoas que supuestamente habían sido capturadas ilegalmente por un pesquero atracado en el puerto de Portonovo (Pontevedra). La incautación se llevó a cabo durante la madrugada de ayer cuando el Servicio Marítimo de la Guardia Civil, en el ámbito de sus competencias específicas, procedió a la inspección de varios barcos de pesca de arrastre que estaban atracados en el muelle de Portonovo.

En una de las embarcaciones el dispositivo de inspección procedió a la incautación de 3.900 kilos de anchoa, por hallarse dicha especie en veda y carecer de cupo autorizado para esa pesquería. Los efectivos del Servicio de Guardacostas de Pontevedra, que colaboraron en el operativo, se hicieron cargo de las anchoas para su posterior entrega en una de las delegaciones locales del Banco de Alimentos.

En otra de las inspecciones se procedió a la denuncia del patrón del barco por supuesta falsedad documental en la anotación del diario electrónico de a bordo, al registrar 4.500 kilos de verdel, cuando en realidad se trataba de anchoa, que ya había sido desestibada y cuyo destino se está investigando.

En el transcurso de este dispositivo especial de control e inspección pesquera, coordinado por el Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil y el Servicio de Guardacosta de la Xunta de Galicia, colaboraron el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y la Patrulla Fiscal y de Fronteras de la Guardia Civil.