La XXXV Semana Cultural de San Roque afronta su tramo final. Y ayer, Combarro vivió varios de sus actos más especiales. Después de una Festa da Espuma en la Praza da Chousa en la que decenas de pequeños aprovecharon la buena temperatura para disfrutar, la parroquia se entregó a la Virxe da Renda, disfrutó con la ingeniosa Festa do Can y se asombró con Willy Pomper.

Tras los juegos infantiles con la espuma que aportó por la agrupación de Protección Civil de la localidad, Combarro se puso más seria a última hora de la tarde de ayer para entregarse de nuevamente a la Virxe da Renda.

Tras el día de San Roque, que la imagen pasó en el santuario homónimo, los fieles condujeron en hombros a la virgen de nuevo hasta su lugar habitual, la capilla da Renda, situada en lo alto de la parroquia.

Decenas de feligreses acompañaron el paso al son del grupo de gaitas Vides Novas antes de la ceremonia especial que comenzó una vez la imagen fue devuelta, dos días después, al espacio que le corresponde.

Tras el acto más religioso llegó el jocoso, con la Festa do Can. Fue nuevamente en forma de paso, aunque en esta ocasión no para venerar a una representación religiosa, sino a un joven y a un "can" Un pequeño ataviado con un traje de época fue llevado a un hombros en una especie de trono junto a un pequeño perro que le da nombre a la fiesta. Esta celebración, ya habitual dentro de la programación de la Semana Cultural de San Roque, levantó una gran expectación entre los turistas, que se sorprendieron por ver paseando por las calles del casco histórico tan curiosa procesión.

Ya para terminar el día, el mago Willy Pomper ofreció en la Praza do Alcalde su espectáculo con pompas de jabón, con el que embelesó a las decenas de asistentes y curiosos que se acercaron para comprobar sus dotes.

Hoy será el penúltimo día de celebración de San Roque. Y en el programa están previstos dos actos relacionados. A las 20 horas tendrá lugar el Festival de Folclore en A Chousa con varias bandas. A las 22, los Cantos de Taberna.