La celebración de la jornada festiva en honor a San Roque permitió ayer a los vecinos de la parroquia de Santa María do Campo disfrutar de la recien remodelada bajada a la iglesia, una actuación ejecutada por el Concello de Marín y demandada en diferentes ocasiones por los vecinos de esta zona.

La obra garantiza no solo el acceso y la puesta en valor de este conjunto histórico arquitectónico, sino que además el Concello instaló una iluminación decorativa que se puede apreciar en su entorno por las noches.

Los vecinos se encargaron de la organización de los festejos, en los que la procesión discurrió hasta la iglesia, de finales del sigloXII, de estilo románico y tras cuyo retablo, aparecieron decorando los muros del altar mayor unas interesantes pinturas.