La Xunta busca soluciones al caos viario que se registra cada fin de semana en el entorno del istmo de A Lanzada y sus principales accesos, sobre todo en la vía rápida de Sanxenxo, que lleva desde la Autovía do Salnés hasta el tómbolo.

Para ello ha recurrido al empleo de drones, que el sábado tomaron imágenes que servirán de base a un estudio con el que "definir el comportamiento del tráfico en los momentos de mayor afluencia a las playas y durante la salida de las mismas".

Así lo explican en la Xunta, que sin comprometerse a afrontar el prometido desdoblamiento de la vía rápida para dotarla de cuatro carriles, y sin aludir al semáforo instalado hace unos meses en Noalla y que fue preciso apagar, ya que agravaba los problemas viarios, sí reconoce que una vez evaluada la información recogida por los drones será el momento de "determinar las medidas a acometer para minimizar los atascos".

Desdoblamiento

Se trata, explican en la Consellería de Infraestructuras e Vivenda, de un trabajo que se desarrolla "en paralelo al estudio de alternativas para el desdoblamiento de la vía de alta capacidad hasta O Grove", provista de un solo carril en cada sentido, dotada de una mediana para tratar de reducir el riesgo de accidente -eran demasiado frecuentes- y colapsada con cada temporada estival.

Eso sí, la Xunta deja claro que esas "alternativas para el desdoblamiento" deben ser necesariamente compatibles con la preservación de los importantes valores naturales de la zona".

En definitiva, que con la recogida de datos desde los drones en el entorno de A Lanzada la Xunta quiere "implantar mejoras en la fluidez de la circulación en las jornadas de playa".

Continuos atascos

Está por ver si esto calma los ánimos del alcalde de O Grove, José Cacabelos, de los empresarios de esta localidad y de Sanxenxo, los vecinos mecos y de todos los usuarios de la vía rápida que se ven atrapados en interminables retenciones cada verano, y muy especialmente los fines de semana y días festivos.