Hablar de turistas en verano en Galicia es hablar de Sanxenxo, epicentro de este sector en la comunidad, y el comportamiento de su amplia oferta hotelera es un índice básico de la evolución general. A la vista de los datos oficiales del Consorcio de Empresarios Turísticos del municipio (CETS), el mes de julio ha registrado una ocupación media del 74,24%, una cifra que no se puede considerar negativa pero que está muy lejos de los dos excelentes ejercicios anteriores, cuando el mismo mes superó el 80% de ocupación tanto en 2016 como en 2017, año en el que se llegó incluso al 82%. Este mes se registra, por tanto, una ocupación media ocho puntos más baja que hace doce meses.

De este modo, el presente 2018 supone, al menos hasta el momento, romper con dos años de crecimiento muy notable, un fenómeno que el presidente del CETS, Francisco González -también responsable del Clúster del Turismo de Galicia- a las "malas condiciones meteorológicas" tanto en julio como en los meses anteriores -y que tuvieron su clara plasmación este fin de semana- como a la "inestabilidad económica, que se ha hecho sentir sobre todo desde el mes de junio, cuando vimos como se paralizaban casi en seco las reservas no solo para el mes de junio, sino también para los meses de julio y agosto".

Los datos sobre ocupación se basan en los resultados de este mes en 81 establecimientos del municipio: nueve apartamentos y aparthoteles, cinco campings, cinco hoteles de cuatro estrellas, quince de tres, 19 de dos y trece de una estrella y pensiones, así como otros quince establecimientos de otra índole. Aunque la caída es general en todas estas categorías, salvo para los campings, el descenso es más acusado en los hoteles, que llega a ser de 10 puntos en los de cuatro estrellas y de 24 en los de tres.

El reto de la consolidación

González López prefiere apostar por una lectura positiva de estos datos y subraya que Sanxenxo "consolida un 74,24% de ocupación en nuestras 15.000 plazas de alojamiento regladas en el sector hotelero y extra hotelero, además de las plazas en viviendas de uso turístico y segundas residencias". En ese intento de evitar derrotismos, el presidente del CETS subraya que la ocupación de este mes "significa 15 puntos por encima de los resultados de 2012 o 2013, e incluso superando los resultados de 2015".

Por ello, señala que "después de cinco años de crecimiento constante y años de récord turístico, la carrera no es, ni debe ser por el récord turístico, por crecer cada año más en ocupación". A su juicio, "la apuesta debe ser por la estabilidad respecto a los resultados turísticos de los últimos años y abogar por el incremento del gasto medio y de la rentabilidad".

En todo caso, el sector se muestra este año prudente con respecto a los resultados de todo el verano. Conscientes de que ya será difícil repetir los resultados de los dos ejercicios anteriores, ahora se lanza la consigna de "estar muy atentos a como evoluciona de la temporada estival porque no se presenta con las alegrías de otros años, pero tampoco es para asustarse si se consigue consolidar los réditos turísticos de años anteriores".

Francisco González apunta que "después de años de importantes crecimientos en los que los hoteles se reservaban a muy buen ritmo, ahora hay que acostumbrarse a la normalidad. Durante los años 2016 y 2017, el turismo español vivió años de récord consecutivos, en parte por la inestabilidad política que sufrían varios países del Mediterráneo, como Egipto o Túnez, competidores directos de España en turismo de sol y playa. Ahora, tras la mejora de la situación en estos destinos, el turismo español comienza a frenar sus cifras de crecimiento en los últimos años. La demanda española se frenó en el segundo trimestre del año, debido a la pérdida de empuje del consumo y una meteorología poco propicia para las escapadas".

Calidad de desestacionalizar

El CETS siempre ha apostado por la calidad como mejor marchamo turístico de Sanxenxo, más allá de la oferta clásica de "sol y playa", y por atraer visitantes fuera del verano. Su presidente deja claro que el sector "debe seguir trabajando desde la óptica de la colaboración publico privada en la promoción de su marca turística como el referente claro que es a nivel nacional de ser el destino vacacional del norte de España, Sanxenxo es sol y playa en el verano, pero también es fuera de verano ese lugar de escapadas que ofrece un destino náutico, gastronómico y de enoturismo, de ocio y vida nocturna. Debemos seguir con nuestra promoción internacional ya que en ella se encuentra una parte muy importante de nuestra desestacionalización".