Durante años, el sector de la compraventa de vehículos y los concesionarios se ha visto muy afectado por la crisis, apenas paliado por los planes estatales de ayuda a la compra de turismos, para renovar el parque móvil. Aunque el nivel actual aún está muy lejos de las mejores etapas del sector, cuando se vendían más de cinco mil coches al año en la comarca, los datos de matriculación del primer semestre de este año ponen de manifiesto que la compra de turismos ha recuperado el índice de hace una década.
Si en 2009 se matricularon en Pontevedra entre enero y junio un total de 737 vehículos, en ese mismo periodo del actual ejercicio ya se alcanzan las 771 operaciones, es decir casi 130 al mes, un nivel que solo se alcanzó en 2010 (en aquel año fueron 909 transacciones en seis meses) pero que fue cayendo progresivamente en los ejercicios posteriores hasta que se llegó a los peores resultados entre 2012 y 2014, con menos de 900 operaciones en cada año en la ciudad y menos de 2.000 en toda la comarca.
A partir de ahí, la actividad comenzó a aumentar, aunque de forma suave y en 2015 ya se superaron solo en la capital las 1.200 matriculaciones, cifra que aumentó un 6% en el ejercicio siguiente y otro 4% en 2017.
El balance de los seis primeros meses de 2018 son aún más positivos, ya que el aumento se puede cifrar en un 12% con respecto al mismo periodo del año anterior. Las 771 transacciones entre enero y junio son el mejor dato de la década (salvo 2010) si bien no se trata en todos los casos de turismos nuevos, ya que el mercado de segundo mano creció de forma notable con la crisis.
Otras categorías
Pero no son solo los turismos los que han experimentado este año un aumento con respecto al ejercicio anterior. También de detecta un importante repunte en otras categorías. Así, según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) que recoge el Instituto Galego de Estatística (IGE), este año ya se han matriculado en la ciudad 95 camiones y furgonetas, es decir, 16 al mes, cuanto en todo 2017 fueron 152, apenas doce mensuales. Lo mismo ocurre con las motocicletas, que suman 94 operaciones entre enero y junio (16 al mes), muy cerca ya de las 120 de todo el pasado año, cuando se matricularon unas diez motos cada treinta días.
En total, el pasado año, la DGT tiene contabilizadas en la ciudad 1.769 transacciones en total, incluidos autobuses, tractores y otros vehículos, mientras que este año, en solo seis meses, ya se ha cubierto más del 56% de esa cifra.
Este significativo auge del sector en la capital también tiene su reflejo en el conjunto de la comarca, que suma 1.582 matriculaciones en el primer semestre, cuando en el mismo periodo de 2017 fueron 1.422. Sin embargo, en este caso se observan notables oscilaciones entre municipios. Territorios como Poio, Vilaboa y Cuntis muestran un avance considerable con respecto al ejercicios anterior, junto con Pontevedra o Portas, mientras que Sanxenxo o Marín se sitúan en cifras muy similares, al igual que Moraña, Barro o Ponte Caldelas. En el otro lado de la moneda aparecen Caldas o A Lama, con ligeros descensos.
Antigüedad
Esta reanimada actividad en la compra venta de vehículos tiene su reflejo en el volumen total del parque móvil pontevedrés y, sobre todo, en su edad media. Sin embargo, los últimos datos al respecto de la DGT se refieren a 2015, cuando situaba el parque móvil del municipio de Pontevedra en poco menos de 55.000 vehículos de todo tipo, 40.800 de ellos, turismos. El número de personas con carné de conducir era de 52.600 personas.
En aquel momento, la edad media de los turismos era de 11,1 años, por delante de los 9,5 años de las motocicletas y los 12,2 de los camiones. También se detallaba el número de vehículos que circulaban entonces sin la Inspección Técnica (ITV) en vigor, con unas 900 motocicletas en esa situación irregular y más de 2.400 turismos (alrededor del 6% del total) en la misma situación. Otras 900 unidades de otras categorías también carecían entonces de ITV.
