Inspectores de la Agencia Tributaria investigan los pisos de alquiler turístico de Sanxenxo. Lo hacen de forma presencial, llamando a la puerta de cada uno de los apartamentos para hacer preguntas a los ocupantes que, en todos los casos, son las personas que los han arrendado y por lo tanto están disfrutando de unos días de descanso. Es la queja de la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga), cuya presidenta, Dulcinea Aguín, recuerda que estos inmuebles se alquilan a través de plataformas web en las que consta quién los alquila, a quién, por cuánto tiempo y a qué precio. Datos que la Agencia Tributaria puede comprobar sin necesidad de molestar a los clientes, como explica Aguín.

La agrupación recuerda que la actividad está perfectamente reglada y sometida a los mismos controles fiscales que cualquier otro sector, por lo que considera "un agravio comparativo" este tipo de inspecciones presenciales "puerta a puerta", porque "los inspectores no se presentan a la puerta de una habitación de hotel para preguntar a quien está dentro cuánto pagó y a quién; nuestra actividad es igual de transparente que la de un hotel, las transacciones económicas constan en documentos y se pueden comprobar a través de las declaraciones fiscales de cada arrendador", explica la portavoz de los propietarios de Viviendas Turísticas.

La asociación recuerda además que es el segundo año que se produce esta situación, a pesar de los intentos del colectivo por resolver este problema con la Agencia Tributaria y evitar que se volviese a producir. Pero durante la mañana de este jueves los inspectores han vuelto a llamar a los telefonillos de los pisos de alquiler turístico de Sanxenxo, molestando a sus inquilinos con un interrogatorio. ¿Quién es el propietario de la vivienda? ¿Por cuánto tiempo la alquiló? ¿Cuántas habitaciones? ¿A qué precio? ¿El alquiler se hizo con el propietario o a través de un portal de internet?, son algunas de las preguntas que les hacen.

Los clientes están trasladado su queja a los arrendadores porque, con toda lógica, entienden que no son ellos quienes tienen que dar explicaciones sobre el negocio y hacerlo además en sus días de descanso.

Por otra parte, los propietarios de viviendas vacacionales no entienden que se siga "demonizado" al sector pese a todos sus intentos por normalizar su actividad conforme a todas las exigencias legales. Subrayan además que sus clientes les comentan que han alquilado viviendas turísticas en otros puntos de España y que solo han sufrido estas inspecciones en Galicia.