Ni los ataques de los lobos ni la normativa que afecta a la ganadería cabalar. La rapa de Amil se mantiene firme pese a los obstáculos con las que choca esta actividad en los últimos años. Así, esta parroquia de Moraña celebra este fin de semana una nueva edición de su tradicional "baixa das bestas", la más concurrida de la comarca y que se extenderá, como es habitual, a lo largo de dos días.

Mañana sábado las actividades se concentran por la tarde, con la reunión de los animales en el pastizal de Amil, para comenzar a las 19.30 la rapa en el curro, con la separación de los potros y otras faenas, que se prolongarán unas dos horas. La jornada finalizará con una cena campestre y una verbena.

Al día sigueinte, el domingo día 15, están previstos actos desde las doce de la mañana, con la reunión de los caballos para el curro y una nueva separación de los potros. Después de una exhibición de monta, a las cinco de la tarde se desarrollará la rapa, marca y venta de los animales, para proceder al sorteo de uno de los ejemplares a las 20.00 horas. La jornada estará amenizada por un grupo de gaitas.

Por otra parte, Amil acogerá a finales de agosto, los días 25 y 26, su cita gastronómica con el porquiño á brasa y las reservas de los cincuenta lotes previstos se podrán realizar hasta el próximo 23 de julio.

Cada uno de ellos está integrado por un porquiño á brasa entre 14 y 16 kilos, dos empanadas de kilo y medio cada una, doce botellas de viño tinto de Barrantes, agua, pan, café y bica de postre.