La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, considera "un escándalo que después de diez años de trámites todavía no tengamos la seguridad de que en un plazo breve de tiempo se vaya a ejecutar el desdoblamiento de la vía rápida".

Y es que "cuando se realizó el proyecto de la autovía do Salnés ya fue una aberración no llevar los cuatro carriles hasta el istmo; lo lógico habría sido que la Xunta contemplara esta posibilidad desde un principio",

No se hizo así, pero unos años después se barajó ese desdoblamiento de nuevo e incluso se redactó y presentó un proyecto para dotar también de cuatro carriles esos siete kilómetros finales del trayecto hasta A Lanzada.

"Pero nunca más se supo y la última noticia que tuvimos fue que estaban todavía con el estudio de impacto ambiental, lo cual es algo que a estas alturas suena ridículo y que en pleno siglo XXI no se explica", declara Carmela Silva. Dicho esto se pregunta "por qué no hay aún un proyecto cerrado que garantice todas las medidas necesarias para evitar cualquier impacto ambiental", y esto la lleva a resaltar que "si fue posible afrontar una obra tan compleja como la de ampliación del puente de Rande también es posible hacer el desdoblamiento de la vía rápida hasta A Lanzada".

Para conseguirlo, y que se haga realidad cuanto antes, proclama que "es una obra de interés gallego, ya no de O Grove, Sanxenxo o la provincia, sino de toda Galicia, puesto que esta infraestructura viaria repercute directamente en el turismo, que es un sector productivo fundamental para el desarrollo económico y la generación de empleo".

Convencida de que "para la Xunta tiene que ser fundamental crear infraestructuras adaptadas a la demanda que tenemos", la presidenta provincial recuerda que "cada vez recibimos más visitantes" y apostilla que "no solo en verano, sino que durante todo el año estamos haciendo un enorme esfuerzo por desestacionalizar que debe tener cumplida respuesta en la creación de infraestructuras que, como esta autovía, respondan a la demanda y faciliten la llegada de visitantes a un lugar tan emblemático y maravilloso como es O Grove a todos los niveles, tanto turístico como gastronómico, cultural o paisajístico".

Lo que quiere decir es que por tratarse de "una obra de interés gallego", el ansiado desdoblamiento "debe formar parte de las prioridades" de la Xunta.