Ponte Caldelas cerró un intenso fin de semana en la que los platos de la cocina de los países relacionados con la diáspora gallega fueron los protagonistas. La Festa Gastronómica da Emigración gana adeptos y se vendieron unos 18.000 platos, por encima de los 15.000 de la última edición.

Otro de los hitos de la III Festa Gastronómica fue la queimada. La Asociación de Amigos da Troita se ocupó este año del hechizo y elaboración, y se sirvieron un total de 40 litros de esta bebida en una cita que volvió a contar con los mariachis Amigos de México y de Leonardo Enríquez, sin olvidar a las charangas y otras ofertas.