A título personal, la subdelegada del Gobierno señaló alguno de los momentos más complicados para ella en estos meses en los que estuvo en el cargo. Ya antes había hecho referencia al asesinato machista de María José Mateo como uno de los sucesos más tristes y difíciles a los que se enfrentó, además, "a los 20 días de llegar" a la Subdelegación.

Ana Ortiz añadió que quizá "lo más complicado" fue aquella jornada de octubre pasado en la que los incendios asediaron la provincia de Pontevedra. La subdelegada explicó que aquella jornada quedó marcada por la respuesta de la gente y también de las fuerzas de seguridad. "Sabía de su profesionalidad y trabajo" pero considera que aquel día se mostraron como personas "leales, colaboradoras y entregadas", al acudir tanto a la Comandancia como a la Comisaría de Vigo la práctica totalidad de los agentes que estaban francos de servicio e incluso alguno de vacaciones.

Por último, señaló al reciente suceso de la grave explosión de Tui como una tragedia "impresionante e impactante". Explicó que las pirotecnias se ven sometidas a una inspección anual por parte de la Subdelegación, dos al año por parte de la Guardia Civil, pero insistió en que en este caso el problema radicó en que se trataba de un almacenamiento "ilegal" en unas instalaciones que no cumplían con los exigentes requisitos que se piden a las pirotecnias.

Sonia Iglesias

Por último, al igual que sus dos predecesores reconoce que se va con la "espinita" de que todavía no se haya podido resolver la desaparición de Sonia Iglesias. "Me hubiera gustado que el caso estuviera resuelto sobre todo por la familia que lo está pasando muy mal". "Es cierto que se ha reactivado pero de momento no hemos conseguido esclarecerlo", indicó Ana Ortiz.