En la sesión plenaria celebrada ayer en Poio se dio cuenta del estado del proyecto de reforma y ampliación del centro de salud de Anafáns.
El portavoz del BNG Xulio Barreiro lamentó -al igual que en el caso de la depuradora de aguas- que la Xunta haya estado "dando vueltas" a este proyecto con la "clara intención de no hacer nada", pese al déficit de infraestructuras sanitarias del municipio. "Nos marearon, nos vacilaron, es una tomadura de pelo y su forma de quedar bien y no hacer nada", dijo.
También el edil socialista Gregorio Agís criticó el nuevo plan para Anafáns (ahora a través de una ampliación de la planta superior del actual edificio), que calificó de "parche".
El pleno aprobó también la revisión de los precios del contrato de recogida y transporte de basura en Poio, según el cuál el Concello pagará unos 6.500 euros más a la empresa concesionaria del servicio, Valoriza, pero dejará de pagar la suma de 13.000 euros a Sogama.
Estas cantidades vienen dadas por el incremento de la retribución a la empresa por la subida del IPC desde mayo de 2016, por un lado, y por la reducción de recogida de material orgánico por otro, lo que supone un ahorro en el tratamiento de Sogama. Este punto contó con el voto favorable de BNG y PSOE, la abstención de la concejala no adscrita Silvia Díaz y el voto en contra del PP.
