Los diez composteros comunitarios urbanos existentes en la ciudad han tratado ya 73,8 toneladas de materia orgánica desde la puesta en servicio del primero de ellos, en Monte Porreiro. En este barrio hay tres de estos centros, en servicio desde julio de 2016. Después se instalaron dos en el campus y en los últimos meses otros cinco en San Brais, Eduardo Pondal y sus alrededores.

La concejala Carmen da Silva explica que los de mayor actividad son, precisamente, los últimos puestos en marcha, en Eduardo Pondal, con 8,8 toneladas de biorresiduos ya tratados en apenas 50 días de funcionamiento.

Los casi 74.000 kilos ya depositados en estos composteros, que equivalen a una población de unas dos mil personas, no incluyen los datos de los existentes en la Ciudad Infantil Príncipe Felipe ni en la Brilat.

El compost surgido de estos recintos es de "alta calidad", si bien se ha detectado en algunos casos la presencia de cinc procedente de los propios recipientes, por lo que el Concello ha solicitado a la empresa suministradora que corrija este problema.

El gobierno local no instalará más composteros urbanos hasta disponer de personal propio para su atención. Ha convocado cuatro plazas de personal interino, un técnico y cuatro auxiliares, que ya suman más de 150 aspirantes, 61 para el primer caso y 91 para el segundo. Las pruebas de selección comenzarán en los próximos días.