El gobierno local de Pontevedra ha expresado su oposición a la modificación del plan del grupo energético Ence, de carácter supramunicipal aprobado por la Xunta, para construir una planta de biomasa en la factoría de fabricación de pasta de celulosa.

Ence afirma que su proyecto prevé una inversión de 120 millones de euros y la creación de unos 80 puestos de trabajo directos y otros 200 indirectos, para una planta de biomasa con una potencia de 40 megavatios, una instalación de secado de cortezas y una red de gas natural para abastecer sus hornos.

El proyecto, que podría ser construido en un plazo de tres años, requiere una modificación del plan sectorial, que fue presentado ante la Xunta el pasado 28 de marzo y, actualmente, está en trámite de evaluación ambiental.

Según la concejala de Disciplina Urbanística, Carme da Silva, el motivo que justifica la declaración de supramunicipalidad para Ence "ha desaparecido", ya que se había aprobado para la construcción de una planta de papel tisú que, posteriormente, fue descartada.

"Estrategia pactada"

"No cabe su modificación sino su anulación", ha señalado la teniente de alcalde, que ha considerado que con ese argumento "se abre una nueva vía" para que el Concello de Pontevedra acabe recurriendo a los tribunales para frenar los planes de la empresa.

La petición de la compañía, según la edila, del BNG, es un "paso más" en la "estrategia pactada" entre el grupo empresarial y el PP para "violentar" la voluntad de una mayoría de ciudadanos de Pontevedra "que no quieren que Ence siga ahí" en la ría.

Una parte de los ciudadanos de Pontevedra recriminan a la planta de Ence la contaminación de la ría, los olores desprendidos y el impacto visual, frente a otros que consideran que la fábrica ha generado empleo y ha contribuido a generar riqueza.