El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, visitó esta mañana las obras de la circunvalación de Pontevedra. Durante el acto llamó la atención que el presidente presentaba un vendaje que inmovilizaba dos dedos de su mano derecha.

El propio presidente, al término del acto, explicaba a los periodistas en tono distendido que fue como consecuencia "de un golpe" que se dio durante sus días de vacaciones en Sanxenxo pero restó importancia a la lesión.