Al margen de las actuaciones de emergencia que se llevan a cabo desde el pasado miércoles, y que continúan hoy, para evitar daños personales, en la vía pública y en los edificios más próximos, el magnolio de Méndez Núñez precisa de un mantenimiento periódico que garantice que no se agravan las razones del peligro actual.

Por ello, no se descarta notificar desde el Concello a la propiedad la necesidad de asumir un seguimiento exhaustivo del árbol, en especial por la zona tan "especial y delicada" en la que se ubica. "Es necesario un plan permanente de mantenimiento", dicen los técnicos.