Fue un proyecto que se manejó hace más de cuatro años, pero la negativa de última hora del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) a ceder el viejo puente del tren en desuso sobre el río frustró la creación de un enlace peatonal entre Monte Porreiro y Lérez. Pero el Concello no renuncia a esa conexión.

Así lo apuntó ayer el alcalde, Miguel Fernández Lores, al visitar las obras de regeneración de la playa fluvial, a escasos metros de ese viaducto. Lores anunció la intención de insistir ante Fomento para lograr la cesión de una estructura en la que no hay tráfico desde principios de 2014.

Los servicios técnicos disponen de un primer borrador de conexión peatonal desde el entorno de la playa fluvial hasta las inmediaciones del monasterio de Lérez, si bien requiere que se ceda también el tramo ferroviario sobre la avenida de Buenos Aires y la ejecución de varios muros de contención en la otra orilla. El puente tiene una longitud total de 116 metros y está conformado por tres arcos de hormigón.

En marzo de 2016 el Concello y Adif firmaron el convenio por el que pasaron a manos municipales durante 75 años unos 20.000 metros cuadrados de espacios habilitados con las obras del Eje Atlántico ferroviario, pero de aquel acuerdo quedaron excluidos los 8.500 metros cuadrados que se corresponden con el tramo de la vía del tren entre la avenida de Buenos Aires y Lérez.

Sí se cedieron las plataformas existentes en la calle Doce de Novembro, en A Seca y en Médico Ballina, si bien pasados casi dos años desde entonces, las tres pasarelas sobre las vías continúan sin uso alguno. Un parque de skate y áreas de juego en Doce de Novembro, zonas deportivas en A Seca o un parque infantil en Médico Ballina fueron algunas de las ideas pero ninguna ha fructificado. Ni siquiera se ha ejecutado una acera en Doce de Novembro para poder circular a pie desde la rúa das Hortas hacia Joaquín Costa. Pese a ese parón, el Concello no renuncia a lograr otra cesión más.