La Policía volvió a rastrear ayer la propiedad de Julio Araújo en San Mauro, en la búsqueda del cadáver o de alguna pista concluyente sobre el paradero de Sonia Iglesias. Lo hizo durante toda la mañana y con medios técnicos semejantes a los desplegados el día anterior, con la participación de la Brigada Central de la Policía Científica y de los agentes especializados del Grupo Operativo de Intervenciones Técnicas.

Los agentes continuaron peinando la finca anexa a la vivienda familiar de Julio Araújo y los pozos situados en la misma. En esta segunda jornada de búsqueda el rastreo se extendió al interior de la capilla de San Mauro, situada ante la vivienda, en la que los agentes inspeccionaron una vieja alcantarilla que discurre bajo el templo y a la que se puede acceder a través de una tapa situada en el pavimento de la propia iglesia, según explicaron los vecinos que facilitaron el acceso a la capilla a los agentes de Policía.

Para entrar en el templo y llegar hasta esta antigua canalización, los agentes tuvieron que buscar a la persona que cuida la capilla habitualmente, a la que localizaron a través del presidente de la asociación de vecinos de Mourente.

Previamente los investigadores excavaron en una vieja caseta en ruinas y en una fosa séptica situada entre la vivienda y el templo.

En la bodega

Los vecinos del entorno aseguraron además que en la tarde del pasado martes también se excavó el suelo de la bodega de la casa de la familia Araújo, en la que hace años residieron la pareja formada por Sonia Iglesias y Julio Araújo. Esta vivienda y los galpones anexos se encuentran en la actualidad en un estado semiruinoso y está a la venta.

La finca situada tras la casa está dividida por un muro y en ambas secciones desplegaron su búsqueda los agentes durante los últimos días.

Ayer contaron con la colaboración de un primo de Julio Araújo, que se acercó al lugar para abrir el portalón de acceso a la finca, en la que se adentraron tres vehículos de la Unidad de Subsuelo de la Policía Nacional.

Cobertizos

Las labores de rastreo en este solar, en los pozos y cobertizos anexos a la vivienda de los Araújo y en la propia capilla de San Mauro, se prolongaron durante toda la mañana, ante la mirada de numerosos curiosos. Los pozos, tanto de agua potable como de fosa séptica, fueron vaciados.

Este segundo registro se realizaba ya con Julio Araújo como investigado, que junto a su hermano declaraba en calidad de imputado en la Comisaría de Pontevedra.

En cuanto a la reactivación del caso, el ex jefe de investigación del caso, Serafín Castro, declaró a Antena 3 que "nuevos indicios" han motivado esta búsqueda en un edificio y una finca que ya fueron registrados en el pasado y apuntó que pese a que la causa se archivó provisionalmente en el juzgado, el caso nunca se cerró para la Policía. Durante los últimos meses la Policía Nacional ha seguido investigando el caso Sonia Iglesias, indicó el ex jefe de investigación del caso.

Informes

De hecho, apuntó Serafín Castro, durante los últimos meses del año 2017 se han elaborado nuevos informes policiales sobre el caso que han desembocado en estos registros. "Seguro que habrán encontrado algo", afirmó el ex jefe de investigación del caso.

"El juez no reabre el sumario por unas simples sospechas o unos detalles nimios, en este caso hay detalles importantes que han hecho que el caso vuelva a reabrirse", manifestó Serafín Castro al programa de televisión Espejo Público.

El que fuera responsable de la investigación hace ocho años sostiene que habrá "nuevos indicios" que podrían desencadenar un desenlace de la investigación.

En todo caso matizó que el caso sigue en fase de investigación y que los nuevos indicios no garanticen que el caso se vaya a resolver en este momento.

Sonia Iglesias desapareció en agosto de 2010 y el caso se archivó provisionalmente en el año 2015. Tres años después de este archivo provisional la Policía retoma las investigaciones y los rastreos, ante la aparición de nuevos indicios, según explica el anterior responsable de la investigación. La familia confía en lograr respuestas ocho años después de su desaparición.