Mientras el Gobierno central se limita a poner a la venta, hasta ahora sin mucho éxito, sus propiedades inmobiliarias en la ciudad sin estudiar posibles alternativas de reaprovechamiento, otras administraciones sí apuestan por esta vía. La Xunta llegó a explorar la vía de la venta con su vieja sede de Benito Corbal, vacía y sin uso desde 2009, pero finalmente se dio cuenta de las dificultades de ese método y optó por la rehabilitación para destinar el edificio a otros usos.

Ayer mismo se firmó el acta de replanteo de esos trabajos entre la Xunta y los responsables de la empresa y los directores de obra, "que dará comienza esta misma semana", según anunció Vicepresidencia, que sitúa el plazo de ejecución en trece meses, lo que sitúa el estreno para abril de 2019 aproximadamente.

El proyecto ronda los 4.025.000 euros y se adjudicó en diciembre pasado a las empresas Acciona y Construcciones Ramírez, con el fin de convertir el edificio en albergue de las oficinas autonómicas de empleo, locales para entidades sociales de la ciudad y dependencias universitarias vinculadas al campus Crea.

El edificio, cuyas últimas obras de mejora antes de su cierre se ejecutaron en 1982, dispone de una superficie útil de 5.419 metros cuadrados, de los que casi todos ya tienen destino claro. En las tres primeras plantas -el semisótano y el primero y segundo piso- se situarán las oficinas de empleo de la Xunta, que en la actualidad están en dos locales alquilados en Eduardo Pondal.

En las plantas tercera y cuarta, entidades y asociación de interés social y sanitario dispondrán de 40 oficinas y locales. Finalmente, las cuatro plantas restantes -de la quinta a la octava- estarán a la disposición de la Universidade de Vigo.

La Xunta recordó ayer que el remodelado edificio tendrá una fachada revestida de aluminio y carpintería metálica de doble acristalamiento. Además se mantendrán los tres accesos actuales desde la calle, que serán totalmente accesibles.