Gabriel Barros trabaja en su estudio durante muchas horas al año para recopilar las obras que cíclicamente presenta al público. Hasta el próximo día 15 los marinenses y visitantes podrán ver su exposición en el Museo Torres donde cuelga 45 óleos de variada temática. Al pie de sus cuadros, Barros está recibiendo la felicitación de los visitantes por la variedad y calidad de la obra que muestra.

- ¿Desde cuando esa afición a la pintura?

Desde siempre, ya en la escuela de aquellos tiempos mi pasión era dibujar y pintar. Después tuve la suerte de ser alumno del pintor Torres, en el Ateneo Santa Cecilia, y sus enseñanzas, exigencias y voces de ánimo me fueron puliendo la técnica y la expresión.

- Pero es autodidacta

- Sí, claro. Basado en aquellas enseñanzas y en mi propia ilusión, me pongo a pintar lo que la cabeza y la inspiración me señala. Como puedes ver aquí hay una variada temática para gustos. Paisajes, construcciones y cuadros de inspiración propia. El retrato, en cambio, no es lo mío. Lo hago pero no disfruto con los resultados.

-¿Que destacaría de estas 45 obras?

-No sabría decirte. Cada cuadro es como un hijo. Todo lo que expongo aquí cuenta con mi satisfacción personal y si un cuadro me gusta otro también o más.

- ¿Cuál es su mejor hora para pintar?

- Yo tengo por costumbre hacerlo por las tardes. En mi estudio tengo un gran ventanal y me gusta pintar cuando llueve y hace viento. Cada uno supongo que tiene sus preferencias pero supongo que a todos nos pasa así. Es algo que no tiene mucha explicación para los demás.

- ¿Contento con la asistencia?

Muy contento. Ya han pasado por aquí una gran cantidad de personas y muchas de ellas me han mostrado su satisfacción. Para mí es muy importante que mi obra llame la atención y el boca a boca funciona lo cual quiere decir que se comenta en positivo. Hasta el día 15 en horario de apertura del Museo estaremos aquí a disposición de todos los que nos quieran visitar.