Ya son al menos nueve los municipios de la comarca que han sido escenarios este año de demoliciones urbanísticas por parte de la Xunta. De este modo, ya se iguala el número de concellos en los que actuó la Axencia de Protección da Legalidade (APLU) en todo el año 2016, si bien entonces se contabilizaron 18 demoliciones y de enero a septiembre van quince, según la página web de la Axencia. Todo apunta a que el balance final será más alto que el del pasado año ya que esa página no suele reflejar todas las demoliciones ejecutadas.

Marín y Barro se han unido en los últimos meses a Pontevedra, Sanxenxo, Vilaboa, Cuntis, Poio, Portas y Moraña. En la capital, la última demolición registrada en la web se produjo en julio, con el derribo de una edificación residencial en suelo no urbanizable común. En Marín, por su parte, se eliminó una caseta prefabricada y una caravana emplazados en suelo rústico de especial protección agropecuaria, mientras que en Barro se derribó lo que la APLU califica de "construcción para uso residencial" en terrenos de la misma calificación que en el caso de Marín.

Al igual que en 2016 (y que en ejercicios anteriores) Sanxenxo encabeza hasta el listado de municipios más "visitados" por la APLU. Hasta el momento se tiene constancia de tres demoliciones. Tras Sanxenxo, son Pontevedra, Vilaboa y Cuntis los tres concellos de la comarca que acumulan al menos dos demoliciones en cada caso.

Además del caso ya citado, en la capital se intervino en mayo para demoler una edificación en suelo no urbanizable.

La página web de la APLU tiene contabilizados hasta ahora un total de 98 "reposiciones de la legalidad" en toda Galicia, 48 de ellas en la provincia de Pontevedra, en especial en Cangas (ocho casos), O Rosal (cuatro) y Redondela (otras cuatro). Las quince intervenciones publicadas en la comarca suponen más del 30% de todas las de la provincia.