Las reservas de los embalses de Eiras y Zamáns siguen en mínimos históricos y la Xunta ofrecerá hoy dos alternativas a los concellos de la cuenca Galicia Costa afectados por la sequía para definir el punto exacto desde el que se realizará el trasvase de agua desde el río Verdugo hacia la red viguesa. "Se reforzará el caudal de la presa de Eiras a través de un sistema de bombeo puntual menos agresivo que el azud", defienden desde la Consellería de Medio Ambiente, que estima entre tres y tres meses y medio el plazo necesario para construir esta nueva canalización. El objetivo es proporcionar un caudal extra al embalse del que se abastecen más de 400.000 vecinos de la comarca de Vigo a partir de febrero o marzo de 2018.

Augas de Galicia convocó para hoy a los alcaldes de Vigo, A Lama, Baiona, Cangas, Fornelos, Gondomar, Moaña, Nigrán, Ponte Caldelas, Redondela, Soutomaior, Vilaboa, Porriño, Mos y Oia en la Delegación de la Xunta en Areal para informarles de la ejecución de esta nueva infraestructura y elegir la altura del río Verdugo a partir de la cual se bombeará agua hacia Eiras. De ello dependerá el coste final de la actuación y la potencia necesaria para "impulsar" agua hacia la red viguesa. "Ninguna de las dos opciones necesitan azud, lo que permite agilizar la obra y tiene un menor impacto ambiental al no supone un nuevo obstáculo en el cauce del río", defienden desde Medio Ambiente, que evita por ahora poner cifras a la inversión necesaria, aunque deja claro que se solicitará la participación económica de los ayuntamientos. La Xunta asegura que está "en disposición de asumir la máxima cofinanciación de cualquiera de los dos proyectos", quedando ahora por determinar lo que aportaría cada parte. Su argumento es que el abastecimiento es una competencia municipal, como recogen los artículos 5 y 27 de la Lei de Augas de Galicia.