La factoría de Nestlé en Pontecesures se consolida como una de las referencias indiscutibles del grupo. Ya lo es en cuanto a producción de leche condensada, pero más que lo será ahora que anuncia la exportación de este producto a Arabia Saudí, Qatar, Omán, Kuwait Barein y Emiratos Árabes.

Así lo anunció ayer la propia compañía láctea, que aspira a producir el año que viene en su nave de Pontecesures -uno de los diez centros de que dispone en España- nada menos que 9.500 toneladas de leche condensada destinadas al citado mercado, es decir, el 20% de su volumen total de producción.

En este sentido, cabe resaltar que de la factoría de Pontecesures salen 40.000 toneladas anuales de leche condensada, leche evaporada, dulce de leche y cocido de leche, destinándose el 50% a países europeos como Reino Unido, Francia, Portugal, Italia o Bélgica, pero también a África Central y el Magreb.

Y ahora es el turno de conquistar Oriente Medio; una apuesta por nuevos mercados que tiene mucho que ver, no cabe duda, con el incremento del 30% de la capacidad de la línea de procesado, que hace posible "la fabricación de leche condensada a partir de leche fresca procedente de explotaciones ganaderas de Galicia", ubicadas tanto en la comarca de Caldas como en Lalín, Padrón, A Estrada y otros municipios cercanos.

En buena lógica el incremento de la producción y de las exportaciones requiere de un aumento de plantilla, de ahí que Nestlé anuncie la contratación de nueve trabajadores más, que se sumarán a las 160 personas que en la actualidad operan en esta fábrica asentada a orillas del río Ulla.

Ni que decir tiene que, con una facturación de 2.098 millones de euros y una plantilla media de 4.950 personas en 2016, Nestlé es un "monstruo" a nivel económico que pasa por ser uno de los motores de Galicia.

De ahí la importancia de que una empresa de estas características -presente en 189 países de todo el mundo, con más de 2.000 marcas y 328.000 empleados- refuerce una factoría como la de Pontecesures, inaugurada en 1939 y desde 2012 la única fábrica europea de Nestlé dedicada a la producción de leche condensada.

A este respecto, la propia compañía destaca que desde el año 2010 ha invertido en las instalaciones ribereñas más de quince millones de euros, principalmente para mejorarlas, pero también para avanzar en cuanto a condiciones de seguridad y gestión medioambiental. "Parte de estas inversiones sirvieron también para ampliar la fábrica y centralizar las producciones de los mercados europeos en Nestlé Pontecesures", explican en la compañía.

Lo hacen antes de recordar que la citada factoría del Ullán "fue pionera en la recogida de leche en el campo gallego, ya que hasta su puesta en marcha los ganaderos la utilizaban para consumo propio". Todo empezó en Caldas y Moraña, extendiéndose posteriormente la recogida de leche a Lalín y Allariz. Fue en 1978 cuando comenzó la producción de "La Lechera".