La Guardia Civil de Pontevedra quiso elogiar hoy públicamente a un usuario de la autopista AP-9 quien, poniendo en riesgo su integridad física, pudo evitar las intenciones de un conductor cuando pretendía cambiar el sentido de la marcha en el peaje de la AP-9 en Vilaboa para circular por la autopista en sentido contrario hacia Vigo.

La incidencia surgió la madrugada del domingo cuando un vecino de Mos, de 75 años, que circulaba por la AP-9 en un turismo Peugeot-206, se percató en el peaje de Vilaboa de que se dirigía equivocadamente hacia A Coruña, cuando su intención era ir hacia la localidad de Mos. Pese a las advertencias del peajista y ante el asombro de los demás usuarios, este conductor decidió dar media vuelta en el mismo peaje y deshacer el camino recorrido dirigiéndose hacia Vigo pero por el carril izquierdo por el que había llegado y en sentido contrario a la circulación.

La inmediata reacción de este usuario que se encontraba en el peaje acompañado de su familia pudo evitar que el conductor del Peugeot-206 reanudase la marcha de forma tan temeraria, según indica la Guardia Civil. Esta persona, socorrista en A Coruña, consciente del peligro que suponía la escena que estaba presenciando, se bajó de su coche y aprovechando la lentitud y torpeza de la maniobra de este negligente conductor, consiguió que detuviese el vehículo, pudo convencerlo para que regresase al peaje y finalmente consiguió quitarle las llaves del coche, al tiempo que comunica los hechos al servicio de urgencias del 112.

Al llegar una patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil se hizo cargo de la situación y cuando le realizaron la prueba de alcoholemia al conductor infractor, compruebaron que el mismo circulaba ebrio, al superar el triple de lo permitido en tasa de alcohol de aire espirado. El vehículo quedó inmovilizado y el conductor, al que se le investiga penalmente como supuesto autor de un delito contra la seguridad vial, quedó retenido en el lugar hasta que pasó a recogerlo un familiar.

La Guardia Civil elogia públicamente la conducta de este usuario que "sin dudarlo un momento se bajó de su coche y sorteando el riesgo de ser atropellado por los demás vehículos que pasaban por el peaje sin preocuparse lo más mínimo por lo que estaba sucediendo, arriesgó hasta el extremo oponiéndose a las intenciones de un conductor ebrio, cuyas reacciones eran impredecibles". Añaden que "la ejemplar actuación de este conductor, del que finalmente se pudo saber que trabajaba como coordinador del Servicio de Salvamento y Socorrismo de las playas de A Coruña, es el contrapunto de la actitud insolidaria del resto de los conductores que, a pesar de que observaron la gravedad de la situación, ni se detuvieron para prestar ayuda, ni avisaron a la Guardia Civil (teléfono 062) ni a los servicios de emergencia (teléfono 112)".