La Guardia Civil denunció en los últimos días a cuatro personas, todas ellas de nacionalidad peruana, por dedicarse a la venta ambulante de productos pirotécnicos sin autorización y se incautaron de 9.310 petardos, durante las pasadas fiestas que se celebraron en Pontevedra y Vilagarcía de Arousa.

La incautación más numerosa se realizó en Vilagarcia de Arousa durante la celebración de la pasada fiesta en honor a San Roque. Los efectivos de la Intervención de Armas y Explosivos de la Guardia Civil de esta localidad localizaron seis puestos de venta ambulante donde aprehendieron 7.350 petardos.

La otra incautación llevada a cabo por componentes de la Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Pontevedra se realizó el pasado domingo en el recinto de la fiesta de la Peregrina. En esta ocasión, la Guardia Civil se incautó de 1.450 petardos, también de la Clase-I y otros 10 artículos pirotécnicos de clase superior III.

Los productos incautados son de la clase I, y III que tienen una limitación de edad para su venta de 12 y 18 años respectivamente. Los de la clase I son de baja peligrosidad y los de la clase III tienen una peligrosidad media para ser utilizados al aire libre en zonas de gran superficie.

Posibles multas

La venta de estos artificios sin autorización administrativa constituye una infracción grave del Reglamento de Artículos Pirotécnicos y Cartuchería, y sus responsables pueden ser sancionados con multas desde 300 hasta 30.000 euros.

Las Intervenciones de Armas y Explosivos de la Guardia Civil realizan inspecciones a lo largo del año en los establecimientos de venta de pirotecnia, tanto en Pontevedra capital como en el resto de la provincia, intensificando estos controles en las fiestas populares y en fechas navideñas, que son más proclives a la utilización de estos productos.