La noche del miércoles y la madrugada del jueves dejó en Poio pérdidas de miles de euros para la hostelería. Decenas de locales dejaron de ingresar una gran cantidad de dinero ante el apagón generalizado que sufrió el municipio, que fue de aproximadamente 70 minutos en los casos más leves.

Según informó ayer a FARO la empresa Gas Natural Fenosa, responsable del suministro del servicio, el apagón se produjo por una avería en el tramo subterráneo de la línea "Lourizán 3D", una de las derivaciones de la principal.

Desde el sector hostelero, ayer mostraban su desencanto por una avería que afectó sobremanera a los ingresos. Porque se produjo en pleno período vacacional en un municipio que aumenta su población en estas fechas. Y además, en un contexto en el que se disputaba un Real Madrid-Barcelona, un atractivo para atraer más gente a los locales.

Establecimientos de todas las parroquias fueron afectados. "Xantares Galegos", ubicado en Lourido, dentro de Campelo, tuvo que cerrar a las 00:00 horas del jueves debido a que se encontraba sin energía eléctrica desde las 21:45 horas. "No la recuperamos hasta bien entrada la madrugada. Estamos valorando el daño y posiblemente denunciaremos a la empresa", expresaban.

Mientras, en Eirado das Margaridas, también en Campelo pero en este caso en la zona de Liñares, aseguraban que el apagón tan solo fue de una hora. "Aquí suelen ser habituales, pero en invierno. Pero lo de ayer (por anteayer) fue incomprensible. Nos quedamos sin luz ni gas. Usamos velas y perdimos clientes", añadían.

Otra de las grandes zonas afectadas fue Combarro. Desde el Tinta Negra calificaban la noche como "catastrófica". "Teníamos el local lleno y se nos vació. Fueron 70 minutos de apagón. Suficientes para dejar de ingresar al menos 2.000 euros. Denunciaremos, sí", expresaron.

Por su parte, en el Restaurante Porteliña de San Salvador perdieron la luz más de una hora y media, lo que le hizo dejar de servir cenas y perder cientos de euros. Ellos no denunciarán, "en principio".

Mientras, en el Asador A Freixa de San Xoán pudieron servir tan solo una parte de las cenas a las 180 personas que tenían programadas. "Son unos cuantos cientos de euros menos. Por suerte los que ya estaban cenando pudieron seguir porque tenemos barbacoa y gas", destacaban.

Por último, en Raxó locales como el Hotel Gran Proa no sufrieron en sus estancias el apagón, aunque otros como Tito Mexillón sí. "Teníamos el local lleno y se dejó de ingresar bastante dinero", expresaban unos hosteleros que recuperaron la luz en torno a las once, hora y media después de perderla.