Fran, peregrino procedente de Madrid, ha realizado el camino a Santiago seis años consecutivos. Considera que es una forma de hacer deporte y de disfrutar del paisaje conjuntamente, además de una manera de conocer a gente y de crear experiencias que sirven para la vida en general. Hace seis años realizaba por primera vez en solitario el camino. "Hacerlo solo es una experiencia que le recomiendo a todo el mundo, te abres más a la gente y conoces a personas que se convierten en amigos". El primer año conoció a Alberto, un valenciano que también se disponía a realizar la ruta sin compañía y ambos estuvieron en contacto todos estos años, realizándolo conjuntamente con sus familias y decidiendo este año volver a hacerlos los dos juntos.