El próximo mes de octubre arrancará la nueva campaña del Proyecto Visir Amen-Hotep Huy que lleva a cabo en Al Asasif-Luxor el Instituto de Estudios del Antiguo Egipto (IEAE) bajo la dirección de Francisco Martín Valentín. Los científicos españoles excavan un gran monumento de un personaje misterioso, el visir, que vivió hace más de 1.300 años un momento clave de la humanidad pero a pesar de ello muy poco conocido por la egiptología dado que los restos de este periodo fueron destruidos casi totalmente. Los hallazgos permiten replantear la cronología faraónica: podrían demostrar que Amenhotep III y Amenhotep IV reinaron juntos.
- ¿Qué resultados arroja la campaña de 2016?
-Le hemos llamado una campaña de transición porque nuestro objetivo era acabar de excavar la entrada del patio de la tumba, que tiene unos 400 metros cuadrados con una media de depósitos de 6 metros de profundidad, muchísimo. Este año hemos concluido la mitad del patio, que era nuestro objetivo, para llegar al lecho de roca, lo que nos ha llevado de 2 a 3 meses y en el camino nos hemos encontrado multitud de piezas, buena parte de ellas fruto del saqueo de las tumbas que están en el patio excavadas y que son unos 300 o 400 años posteriores a la época del visir.
- ¿Qué tipos de objetos se localizan?
-Muy interesantes, todas piezas faraónicas, desde piramidium donde ha documentado un personaje no conocido, que fue inspector o superintendente de los almacenes de Amón-Ra en Karnak, conos funerarios de las tumbas, en fin, piezas de restos interesantísimos, por ejemplo papiros con fragmentos del Libro de los muertos. No se si recuerda de otras ediciones del curso que además el proyecto lo tenemos dividido en dos secciones: una es la restauración y la puesta en valor del monumento, que hasta ahora se estaba haciendo en la capilla, en la otra mitad de la tumba con otros 300 metros cuadrados y 30 columnas, pues este año hemos acabado ahí las 4 columnas que tenían las inscripciones que encontramos en el año 2013 concernientes a Amenhotep III y Amenhotep IV, que ha sido hasta ahora el hallazgo más importante desde el punto de vista documental, arqueológico, de todo el proyecto. Así que ahora las inscripciones están insertadas en los fustes y aseguradas para siempre, allí tienen su sitio y se pueden leer, ha sido una gran restauración. Y ambas tareas, la excavación y la restauración, han dado como resultado una campaña muy rica aunque la llamemos de transición.
- ¿Qué objetivos se plantea la nueva campaña de 2017?
-Para este año es abarcar la segunda mitad del patio, con las vicisitudes que surjan porque uno excava y no sabe lo que va a pasar.
- Sospechaban que las obras del monumento funerario fueron interrumpidas durante la construcción
-Es un tema que esta campaña nos ha permitido confirmar, que las obras de la tumba en época del visir, que era un visir de Amenhotep III, hacia el 1.360 AC, fueron paralizadas. Esto ya lo habíamos sospechado al excavar la capilla, pero ahora en el patio se nos ha confirmado: tras la primera excavación inicial para dejarlo "plano" volvieron a modificar el proyecto para bajar la profundidad de la tumba al objeto probablemente de construir la cámara funeraria debajo de la capilla, pero todo se interrumpió de una manera brusca, hubo una orden abrupta de interrupción de las obras durante Amenhotep IV, quizás por la revuelta que hubo en la revolución amarniense. Hemos encontrado ese estado del suelo pero también mazas de cantero abandonadas in situ como muestra de que algo súbito sucedió, la gente estaba trabajando, le dijeron "para" y dejó las herramientas en el suelo, piezas que hemos encontrado nosotros.
- El proyecto ha permitido arrojar luz sobre momentos muy poco conocidos del Antiguo Egipto
-Absolutamente, es la mejor definición del proyecto porque el monumento se empieza a construir en un momento concreto, que son los llamados 5 años tebanos de Amenhotep IV (el que sería Akenatón después) de los cuales no ha quedado prácticamente nada en Luxor, en Tebas, porque cuando acaba Amarna y viene la restauración de Tutankamón, en la dinastía XIX, Seti I y Ramsés II acaban de "limpiar" de una manera casi científica cualquier resto de lo que pudo haber pasado allí; y hablamos de 5 años de un periodo de la historia de Egipto de 3.300, una gota de agua en el océano. Excavar en un sitio tan preciso como es el en el que trabajamos nosotros nos permite tener una gran cantidad de documentación e información sobre la evolución de los acontecimientos en un punto de la necrópolis y un momento determinado, de modo que cuando acabemos las publicaciones serán un referente ineludible para recomponer la historia de Egipto en este periodo, que es uno de los más importantes no digo de la historia de Egipto sino de la humanidad, porque es cuando surge el monoteísmo etc.
- ¿Cuándo presentarán las publicaciones?
-En estos días verá la luz la publicación de las campañas primeras en una obra que ampara la Diputación de Málaga y que es una memoria de excavación. La idea es presentar el libro en septiembre, estamos en un momento dorado de la ejecución del proyecto, no solamente por el tiempo que ha transcurrido sino por la capacidad de hacer llegar a la comunidad científica la información técnica, muy precisa, de los resultados.
- La pasada semana se celebró en el Museo una nueva entrega del curso de Egiptología, en el que presentó los resultados de la campaña 2016 ¿qué balance hace de estas ya 6 ediciones del monográfico?
-Estamos constatando, y también lo confirma la dirección del Museo, que cada año se incrementa el número de alumnos y hemos pasado de una primera edición con 15 o 20 personas interesadas a llenar casi la sala del Sexto Edificio, así que estamos más que muy satisfechos, incluso la gente pregunta unos días antes cuándo se celebra el curso. Pontevedra empieza a acuñar una tradición egiptológica parecida a la Feira Franca, vamos a comparar así; la gente espera este curso, hay mucho interés y constatamos como acuden a esta ciudad estudiantes de distintas universidades para seguir las jornadas.
