Transcurrido poco más de un año desde que en mayo de 2016 la naviera noruega Maersk convirtiera el Puerto de Marín en su principal base en Galicia, el tráfico de contenedores en las instalaciones marinenses se ha convertido en una de sus principales actividades y ya comienza a acercarse a los volúmenes de movimiento de los cereales, hasta ahora el primer producto del puerto.
Si la segunda mitad del pasado año, justo tras la llegada de Maersk, supuso una revolución en este apartado, al pasarse de 24.000 toneladas al mes a algo más de 71.000, con el inicio de 2017 estas cifras se han visto una vez más superadas. De hecho, el primer año de actividad del gigante noruego en Marín ya ha supuesto más de 800.000 toneladas de mercancía en contenedores, un tercio de todo lo que pasa por el recinto. Según las últimas estadísticas del Ministerio de Fomento sobre la actividad portuaria, que abarca de enero a mayo, en esos cinco meses se acumulan ya más de 392.000 toneladas, a casi 80.000 mensuales.
Además, las previsiones aún son más halagueñas ya que la naviera nórdica apuesta por abandonar por completo Vigo y trasladar a Marín los dos barcos que aún atracan en el puerto vigués. La compañía que gestiona la terminal de contenedores marinense, Pérez Torres, había firmado con la naviera un contrato de un año de duración que expiró en mayo pasado. Desde entonces, este acuerdo sigue prorrogado pendiente de que sustancie en un nuevo contrato, de mayor envergadura que el actual por la inclusión de los tráficos de Vigo.
De confirmarse este nuevo traslado, las cifras actuales, ya muy significativas, podrían quedarse pequeñas. De hecho, a día de hoy las 392.000 toneladas hasta mayo ya están superadas y se rebasan con creces las 400.000, lo que supone el 70% de los contenedores que se movieron en todo 2016. De hecho, tanto en abril como en mayo se rozaron las 100.000 toneladas al mes, por lo que de seguir esta racha el final de año podría llegar con un balance espectacular, próximo al millón de toneladas.
De este modo, los contenedores pugnarían con los cereales, principal producto de Marín, con la primacía portuaria, con algo más de un millón de toneladas el pasado año. Pero si este trafico de graneles crece este año un 40%, el de contenedores ya experimenta un aumento del 225% este año.
En cuanto al número de recipientes, el pasado año se movieron cerca de 65.000, mientras que este año ya se han superado a estas alturas los 50.000. Los últimos, hasta ahora, en llegar, lo hicieron la pasada semana, con una operación simultánea en los muelles Adolfo Reboredo. Dos grandes portacontenedores sumaron 15.000 toneladas de mercancía contenerizada, tanto seca como refrigerada. Se trataba de los buques Contship Joy del servicio X-Press de la naviera Maersk y Cap Roberta, perteneciente a Hamburg Süd. Ambas hacen escala semanal en el Puerto de Marín, y los de la naviera alemana los portacontenedores más grandes que hacen escala actualmente en Galicia. Aquella operación de carga y descarga implicó el movimiento de 2.000 recipientes, lo que obligó a emplear simultáneamente tres grúas portacontenedores.
Balance de 2016
Mientras los contenedores y los cereales crecen en el Puerto y encabezan su actividad, otros productos presentan datos más modestos e incluso la pesca se reduce. Según el balance del pasado año, alrededor de un millón de toneladas de las mercancías totales del Puerto corresponden a cereales y piensos, con un ligero aumento con respecto al año anterior. También creció, de forma más notable, la pesca congelada (de 79 a 131 toneladas) y, sobre todo, los contenedores, que pasaron de 42.600 a más de 67.000 recipientes, para sumar 616.000 toneladas. En cambio, la pesca fresca se mantuvo estable (unos dos mil kilos), al igual que la fruta (118 toneladas), pero cae el tráfico de madera (de siete a cuatro toneladas), los productos siderúrgicos (de 252 a 208) y la pasta de papel, que pasó de 403 toneladas en 2015 a las 378 del ejercicio anterior. También destaca la fruta, otro de los tráficos que se incorporaron en los últimos años de forma notable a Marín, con buques que utilizan el Canal de Panamá.
A lo largo del pasado año los atraques del Puerto de Marín recibieron a 529 buques, en su mayoría extranjeros, ya que los españoles fueron 73. De hecho, llegaron a las dársenas barcos bajo más de treinta banderas, especialmente de los Países Bajos (113), seguido de Antigua y Barbuda (54), Malta (52), Liberia (47), Reino Unido (43) y Chipre (34).
