Las quejas no son nuevas. Se repiten cada vez que se registra un episodio como el del pasado fin de semana. Asociaciones y colectivos profesionales de bomberos consideran que el modelo actual presenta "graves carencias y deficiencias", en especial en personal, e implica el riesgo de "desproteger" buena parte del territorio de la provincia. Así, Miguel Uclés, presidente de la Plataforma de Bombeiros Públicos de Galicia y vicepresidente de la Coordinadora Unitaria de Bomberos Profesionales, insiste en que el interior de la provincia carece de parque comarcal y al estar asignado ese territorio a bases tan lejanas como las de O Salnés y Morrazo, sus propias áreas quedan sin servicio durante las salidas a Cotobade, A Lama o Ponte Caldelas.
Uclés denuncia "la desastrosa situación en que se encuentran las emergencias en Galicia" y hace una descripción de lo ocurrido en Tenorio, una zona, como las demás en una localización parecida, cuyos habitantes "se encuentran en una situación de grave riesgo y abandono debido al deficiente e ineficaz mapa de emergencias de Galicia, que da lugar a grandes conflictos y malos entendidos cuando se trata de la movilización de recursos".
Señala que la primera movilización" afectó al parque comarcal de Ribadumia. Se desplazan todos los efectivos, que son tres bomberos, y uno de ellos sufrió un golpe de calor durante la intervención. Durante toda esa noche el parque de Ribadumia se queda desierto ya que hacen también el relevo de turno en el lugar del siniestro a la mañana siguiente".
Motobomba forestal
Añade que "llega al lugar un camión de contra los incendios forestales pero al no tratarse de un fuego en el monte deciden no intervenir y retirarse, aunque más tarde regresa al lugar", a causa de la tardanza desde Ribadumia, un retraso que este colectivo considera "totalmente justificado" debido a la distancia entre la base y el suceso. "Simultáneamente, se recibe una llamada en el parque municipal de Pontevedra por parte del 112, pero solo a modo informativo, por ser un municipio limítrofe tienen por protocolo informar, teniendo en cuenta que ya estaban movilizados los medios que le correspondían al Concello de Cotobade (los Bomberos de Ribadumia) y dejando claro a Pontevedra que no se requieren sus servicios", asegura Uclés, quien añade que "se repite la llamada al parque de Pontevedra por parte del 112 unos 30 minutos después para requerir sus servicios, pasando por alto el Plan Territorial de Emergencias de Galicia (Platerga), puesto que los efectivos de Ribadumia todavía no habían llegado al lugar. Bomberos Pontevedra informa al 112 que al tratarse de otro municipio deben consultar si pueden abandonar el suyo. Al estar la ciudad del Lérez bajo mínimos y ya con los Bomberos de Ribadumia movilizados, que son los que les corresponde la emergencia y llegando al lugar del incendio, sin declararse el nivel 1 del plan Platerga para solicitar medios externos, finalmente se desautoriza la salida de Bomberos Pontevedra".
Su desplazamiento a Tenorio dejaría "desprotegida" la capital, como ocurrió "con la zona del Morrazo durante varias horas", denuncia esta asociación profesional, que insiste en alertar de "las graves deficiencias en cuanto a la gestión de los operativos, que salen a relucir cada vez que tiene lugar un siniestro".
"Si analizamos el incendio de Cotobade veremos que el Parque de Bomberos de Pontevedra es el más cercano, a 9 kilómetros del suceso, en cambio Ribadumia se encuentra a más de 30 kilómetros. Teniendo en cuenta que la rapidez en la actuación es uno de los factores más importantes a la hora de asumir una intervención, es evidente que algo falla", indica este portavoz, que subraya que "no solo la población de Cerdedo-Cotobade está en grave riesgo ante una situación de emergencia".
A su juicio, "para atender una emergencia en esta localidad son necesarios los recursos comarcales ya que son los que tienen la competencia en este caso. Aquí nos enfrentamos a varios problemas: La situación geográfica de estos recursos, los parques cubren zonas demasiado extensas; el número de efectivos por dotación en estos parques, es extremadamente escueto, resultando peligroso exponerse a situaciones de riesgo con tan poco personal; y abandono y desprotección de grandes extensiones de terreno cuando estos efectivos tienen que resolver sus intervenciones. La zona de Ribadumia y Morrazo se encontraron sin personal en sus parques durante las horas de dicha intervención".
Por todo ello, Miguel Uclés, reclama un cambio de modelo y replantear el mapa de emergencias" ante esta situación de "alarma social".
