La Audiencia Provincial ya está preparada para el juicio, con jurado popular, que se desarrollará la próxima semana contra el presunto parricida de Moraña, David Oubel, acusado de matar a sus dos hijas hace dos años y para el que el fiscal solicita la pena de prisión permanente revisable.

Serán al menos tres días en los que la Fiscalía tiene previsto llamar a declarar al propio acusado y a trece testigos, entre ellos seis agentes de la Guardia Civil.

Ante la duración de la vista oral y la expectación mediática generada, la Audiencia celebrará el juicio en la sala de vistas de la planta baja del Palacio de Justicia de Pontevedra y ha adoptado medidas especiales de acceso.

Tras la primera jornada, en la que está previsto elegir a los miembros del jurado y escuchar a acusado y testigos, el segundo día se reserva para los informes periciales, alrededor de 15, y los informes de acusaciones y y defensa.

Será la tercera jornada cuando comience la deliberación del jurado, si se cumple el calendario previsto, según informó ayer el TSXG

David Oubel, que espera la celebración del juicio ingresado en el centro penitenciario de Mansilla de la Mulas, en León, se enfrenta a una petición de condena de prisión permanente revisable tanto por parte del Ministerio Fiscal como del resto de las acusaciones, tanto al particular, ejercida por la madre de las menores (de quien estaba separado el presunto asesino) como la popular, que ejerce la Xunta de Galicia. La defensa de Oubel Renedo solicitará que se aplique a su representado la eximente completa de trastorno mental transitorio.

Hasta el momento, Oubel Renedo se ha acogido en sus comparecencias ante el juzgado de Caldas que instruyó el caso a su derecho a no declarar y habrá que esperar a ver si mantiene esta misma postura ante el jurado popular.

Según se recoge en el escrito de acusación de la Fiscalía, David Oubel, entre las 8.30 y las 11 horas del 31 de julio de 2015 "con evidente ánimo de acabar con la vida" de sus hijas" y "con la finalidad de evitar cualquier posibilidad de defensa o huida de las menores", les hizo ingerir distintos fármacos con el objetivo de adormecerlas o, cuando menos, lograr que estuviesen con un nivel bajo de consciencia. Después, las asesinó utilizando una sierra radial y un cuchillo, según indica la Fiscalía.