El editor Sabino Torres Ferrer, fallecido en Madrid el 23 de mayo de 2016, a los 91 años, recibirá el próximo mes de junio el rango, a título póstumo, Hijo Predilecto de Pontevedra. Así lo acordó ayer la corporación municipal, si bien no fue por unanimidad. Marea Pontevedra empañó el homenaje y rompió el consenso existente hasta ahora en su recuerdo al poner en duda los méritos de Torres Ferrer para tal distinción. Su portavoz, Luís Rei, justificó su abstención en que "en el expediente -elaborado por el concejal Luis Bará- no vemos la inexcusable notoriedad" del editor para recibir el mencionado título.

Al margen de esta voz discordante, todos los demás grupos ensalzaron la vida y obra de Torres Ferrer y, sobre todo su "amor por Pontevedra y su orgullo por esta ciudad", según expuso Bará. El edil anunció que los actos de homenaje se celebrarán en junio, poco después de que se cumpla el primer aniversario de su fallecimiento, que se conmemora precisamente hoy martes.

La fractura del consenso de ayer, que ya se atisbó hace una semana en el debate en comisión, contrasta con la unanimidad con la que, hace un año, se acordó en pleno impulsar este nombramiento, a propuesta de Ciudadanos.

Luís Rei comparó la figura de Torres con la de Alexandre Bóveda, Hijo Adoptivo en 1999, y concluyó que el segundo sí reunía méritos suficientes. Echó mano del expediente municipal, para señalar que "cualidades como animoso, inquieto, afable, franco y jovial y participantes en tertulias de café adornan también a miles de pontevedreses, que no se proponen para estos títulos".

Para no atacar directamente a la figura, Rei centró sus críticas en la propia documentación municipal para justificar la concesión: "Debe ofrecer algo más que 48 lineas para una vida de casi 92 años y el resultado de ese expediente nos lleva a dudar", apuntó el portavoz de Marea para explicar su abstención.

Poco después apuntó que "no sacaría a relucir" la trayectoria en "política y negocios" de Torres e insistió en que la memoria de la concesión "es aplicable a muchos pontevedreses", lo que levantó la replica de Bará: "Lamento una intervención tan insultante y ofensiva y la ruindad, que es el peor mal que hay en política, está en las antípodas de Sabino Torres".

En la justificación del título se recuerda "el compromiso de Sabino Torres, nacido en este municipio el 24 de junio de 1924, con la literatura gallega y con Pontevedra, así como su pasión por los libros y por su ciudad, destacando como periodista, como editor, escritor y poeta; fue además miembro correspondiente de la Real Academia Galega desde 1952 y decano de los editores gallegos, en activo hasta el final de sus días".

La documentación deja claro que el homenajeado "cumple sobradamente los requisitos" para ser designado Hijo Predilecto, por lo que se acuerda conceder ese título "en reconocimiento de sus méritos con el pueblo de Pontevedra, disponiendo que se confieran los honores y méritos inherentes a la distinción otorgada, con la entrega pública y solemne de un diploma y una placa de metal, en la que constará el nombre y fecha del acuerdo de concesión, así como un botón de solapa que sea muestra del título". Esos símbolos los recibirá su familia, previsiblemente en junio.

Torres Ferrer se une así a una exclusiva relación formada hasta ahora por Augusto González Besada (pese a no ser nativo de Pontevedra, sino de Tui, se le concedió el título, en febrero de 1904 por su papel en la aprobación del proyecto del nuevo instituto, así como el arreglo del exconvento de San Francisco para alojar a las tropas destinadas a Pontevedra), Francisco Javier Sánchez Cantón, que fue director del Museo del Prado y recibió el título de Hijo Predilecto en 1949, el exministro Pío Cabanillas Gallas, galardonado en 1967, y el que fuera alcalde y director del Museo, entre otros cargos, José Filgueira Valverde, distinguido en abril de 1996, cinco meses antes de su fallecimiento.