El posible desabastecimiento de un producto de primera necesidad como es el cloro es uno de los argumentos que utiliza el sindicato Comisiones Obreras y la plantilla de Elnosa para justificar posibles moratorias a empresas como la pontevedresa que no van a cumplir con este plazo límite del 11 de diciembre que marca Europa para abandonar la tecnología de mercurio. Las cuatro empresas que ya han acometido este proceso de reconversión hacia la tecnología de membrana (o que están en proceso) aseguran que estarían en condiciones de abastecer el mercado junto con otros productores europeos.

Actualmente, de las 706.950 toneladas anuales de cloro que se producen en España apenas un 19% se produce con la nueva tecnología de membrana. La propia CUF, dueña de Elnosa, produce en Portugal con membrana. El resto, un total de 575.950 toneladas al año se consiguen utilizando el mercurio, entre ellas las 34.000 de Electroquímicas del Noroeste en Pontevedra. La producción de la planta de Lourizán es la más pequeña del Estado y supone un 4,8% de la producción estatal, aunque cubre buena parte de la demanda de Galicia.

De las siete productoras de cloro en España, estas cuatro han culminado o están en fase de cerrar su reconversión tras abandonar el mercurio. Otras tres, (Solvay, Inovyn y Electroquímicas del Noroeste) no habrían iniciado los trámites para abandonar esta tecnología pero tampoco han comunicado cierre alguno. Elnosa sí anunció su disposición a acometer la inversión necesaria si obtenía la prrórroga de la concesión de los terrenos de Costas y los permisos para realizar la obra.