La actividad marisquera vuelve a la Ría de Pontevedra tras la desaparición de la biotoxina lipofílica. Tras la primera aparición del año 2017, tan solo el polígono Portonovo C de bateas permanece cerrado a la recolección de mariscos.

Ayer Intecmar dio luz verde para la reapertura del polígono Portonovo A, el único que permanecía cerrado junto al C.

Mientras, en cuanto a los moluscos infaunales, la zona V de marisqueo, la más oriental de la ría permanece de nuevo disponible para el marisqueo desde hace una semana. El Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar) había detectado una presencia demasiado alta de la biotoxina en esa zona el 5 de abril, por lo que los mariscadores tuvieron que estar en torno a dos semanas sin poder acudir a trabajar a la zona.