El Centro de Orientación Familiar, COF, de Pontevedra recibió el año pasado 350 solicitudes de interrupción voluntaria de embarazo, la mayoría de ellas realizadas por mujeres mayores de 25 años. Los profesionales de este servicio aseguran que en los últimos años se ha producido un aumento progresivo de consultas relativas a métodos anticonceptivos.
El COF atiende a toda la población del Servicio Galego de Saúde, Sergas, correspondiente a las áreas sanitarias de Pontevedra norte y del Hospital de O Salnés. El año pasado recibió cerca de 25.000 consultas, la mayoría de ellas de tipo telefónico. De estas, unas 3.900 se realizaron con el fin de solucionar problemas clínicos relativos a la anticoncepción o tolerancia de métodos anticonceptivos.
Un 32 por ciento del total de consultas, esto es, 7.900, fueron resueltas presencialmente en el centro de especialidades de Mollabao.
Jaime Dapena González, médico adjunto del servicio de ginecología del Complexo Hospitalario de Pontevedra, CHOP, y coordinador de este centro de orientación familiar, asegura que en los últimos seis años se ha detectado un aumento progresivo de consultas debidas a una mayor demanda de los métodos anticonceptivos reversibles de acción prolongada, LARC (una sigla derivada del inglés). En esta categoría se incluyen los dispositivos intrauterinos, DIU, y los implantes subcutáneos. "También influyó en el incremento del número de consultas la demanda de interrupciones voluntarias de embarazo cuando comenzaron a ser gratuitas en el Sistema Nacional de Salud, aproximadamente unas 400 al año en nuestra área sanitaria", explica.
En 2016 este número fue ligeramente menor en lo referido a Pontevedra y O Salnés, ya que, en total, se dieron 350 solicitudes de aborto. Por franjas de edad, el mayor porcentaje fue el relativo a las mujeres con edades comprendidas entre los 25 y los 35 años, con un 41 por ciento de las consultas, 146. Le siguen las mujeres de entre 18 y 24 años, con 102 consultas, es decir, un 30 por ciento.
Un considerable 24 por ciento de este tipo de solicitudes correspondieron a pacientes de entre 40 y 50 años, con 85 consultas que supusieron un 24 por ciento.
Las menores de edad tan solo representaron un 5 por ciento de las peticiones de abortos, con 17.
Píldora postcoital
Son también las mujeres mayores de 25 años las que más solicitan las píldoras postcoitales, más conocidas como "píldora del día después". "Se solicitan en nuestro centro un promedio de cinco o seis píldoras postcoitales por mes. Las solicitan más las mujeres mayores de 25 años, mientras que las más jóvenes representan solo el 10 por ciento del total", subraya Jaime Dapena.
Sobre este tipo de método anticonceptivo de emergencia, el ginecólogo asegura que en más del 90 por ciento de los casos no existe riesgo de ningún tipo. "En casos excepcionales, los mismos que de cualquier anticonceptivo oral", indica.
Las pacientes de entre 25 y 40 años con pareja estable y algún hijo son las que más utilizan el centro de orientación familiar de Pontevedra. El coordinador de esta unidad destaca que "cada vez más hay mayor número de mujeres que no tienen ningún hijo y que manifiestan su deseo de no tenerlos". Por todo ello, la mayoría de las consultas responden a la demanda de un método anticonceptivo, ya sea con la decisión tomada previamente o demandando información al respecto.
Métodos más seguros
En lo relativo a los métodos anticonceptivos, el preservativo sigue siendo el único que protege de las enfermedades de transmisión sexual, ETS. Sin embargo, existen métodos con una mayor eficacia anticonceptiva como los de larga duración: DIU o implantes. También lo son los anticonceptivos hormonales, como la píldora, el parche o el anillo. "Hoy se recomienda a los jóvenes que usen el doble método: ellas el implante, DIU o píldora y ellos el preservativo", explica Jaime Dapena.
En este sentido, el especialista subraya que es la mujer la que se decide antes "por métodos definitivos e irreversibles" para no tener hijos. "Al hombre le sigue imponiendo miedo el método", responde al ser preguntado sobre un posible aumento en la demanda de vasectomías, que niega. "Los dos métodos son igual de eficaces e irreversibles. La única diferencia es que la vasectomía se puede realizar con anestesia local y la ligadura de trompas precisa de anestesia general". "Debe ser una decisión consensuada habitualmente en el ámbito de la pareja y conociendo ambos la irreversibilidad del método", hace hincapié.
Inicio en el sexo
La edad de inicio en las relaciones sexuales de los jóvenes es cada vez menor. "No disponemos de datos en nuestro entorno directo, lo que sí puedo es decir que, según los últimos datos facilitados por la Sociedad Española de Contracepción (SEC) de una encuesta realizada en el año 2014, las mujeres españolas inician sus relaciones sexuales en torno a los 16 años. Curiosamente, sus madres, una generación anterior, la iniciaban a los 20 años", manifiesta el coordinador del centro de orientación familiar pontevedrés.
Esto provoca que un 40 por ciento de las consultas de información sobre métodos anticonceptivos sean realizadas por adolescentes, del total de una media de 700 u 800 recibida cada año. "La mayoría vienen solas. Si bien últimamente acuden cada vez más madres acompañando a sus hijas para que utilicen métodos anticonceptivos seguros y evitar embarazos no deseados".
La vulnerabilidad es una de las características que, según los profesionales pontevedreses, más pone en riesgo a los jóvenes. "Se creen que nada les puede pasar, que lo malo le pasa a otros. Muchos adolescentes no usaron ningún método en su primera relación sexual ante la creencia de que la primera vez nunca se produce embarazo, lo cual es una falsa creencia popular", destaca el doctor Dapena.
Otro error común es que muchas jóvenes creen que si se olvidan de tomar la píldora un día, pueden tomarse dos al día siguiente. También que pueden no utilizar el preservativo durante toda la relación sexual, salvo al final, cuando tiene lugar la eyaculación, y que pueden tener penetración sin protección al inicio del coito. "Y lo que me parece mas increíble es que muchos, tras un coito de riesgo sin protección, no usan la píldora postcoital porque suponen que por una vez no pasa nada", se lamenta. Y es que los jóvenes desconocen que pueden obtener gratuitamente la píldora postcoital en los centros de orientación familiar de lunes a viernes por las mañanas y en algunos centros de atención primaria. "Desconocen también que se puede comprar en cualquier farmacia sin receta médica", informa el coordinador del COF de Mollabao.
En general, se da una falta de comunicación e información a nivel familiar y escolar, ya que aún hoy día muchos padres evitan hablar del tema con sus hijos "porque los ven más niños de lo que en realidad son".
"En cuanto a los profesores, más que educación sexual imparten información sobre biología de la reproducción. Creemos que una forma de transmitir la información sería coordinando la colaboración entre los colegios y los centros de orientación familiar", considera el ginecólogo.
"Los jóvenes físicamente están preparados para el inicio de las relaciones sexuales, aunque psicológicamente están empezando a descubrirse y relacionarse de forma afectiva con los demás. La parte hormonal va más rápida que la psicológica. A esa edad, en multitud de ocasiones actúan por imitación, les importa lo que opine el grupo de amigos, y este, de alguna manera, ejerce una gran influencia sobre ellos", reflexiona.
Otros factores que influyen en el comportamiento de los adolescentes son los de tipo cultural, familiar y "la erotización de la sociedad", que se hace visible a través de sus series de televisión, publicidad que se dirige a ellos, letras de sus canciones... "La mayor libertad sexual que impera en nuestros días ha hecho que las cuestiones morales de generaciones pasadas se hayan relajado, lo que ha favorecido de algún modo el inicio cada vez más precoz de las relaciones", en opinión de Jaime Dapena.
"Variedad de situaciones"
Pero la falta de información no solo afecta a los más jóvenes. "Como todo en la vida, hay gran variedad de situaciones y personas. Dependiendo del grado de educación de la persona, edad, religión, curiosidad..." , sostiene.
Se piensa que la existencia de información en internet y a través de los medios de comunicación provocan que la sociedad esté mejor informada en materia sexual, algo que no es exactamente así. "De todos modos el hedonismo existente, así como la banalización de la sexualidad, han llevado a unas relaciones sexuales un tanto sorprendentes en los jóvenes, como por ejemplo el sexo en grupo con prácticas peligrosas tanto por las enfermedades de transmisión sexual como por los embarazos no deseados", asegura el coordinador del COF.
"Solamente podemos decir que desde nuestro centro estamos a disposición de toda la población, en especial los jóvenes, para poder informar sobre educación sexual y además dispensar los mejores, así como los más adecuados métodos anticonceptivos a cada paciente que lo demande, con el fin de evitar embarazos no deseados y disminuir lo más posible la cantidad de interrupciones voluntarias de embarazo ", concluye.
