El destino del Hospital Provincial para una residencia pediátrica tomó por sorpresa al ámbito sanitario pontevedrés. A falta de conocerse el plan funcional del futuro hospital único de Montecelo, la Consellería de Sanidade anunciaba el pasado jueves la nueva finalidad del viejo edificio, que ofrecerá 120 plazas con 75 trabajadores a su cargo y un presupuesto de construcción de cerca de seis millones y medio de euros.
Este nuevo uso supondrá un nuevo capítulo a una construcción que abrió sus puertas en 1897, hace 120 años. El que entonces era el nuevo hospital se convirtió rápidamente en un referente médico y permitió sustituir al viejo y semirruinoso de San Juan de Dios, que funcionaba desde el siglo XV en la que actualmente se llama Praza de Curros Enríquez.
El presupuesto del Hospital Provincial fue de 302.573 de la antiguas pesetas (1.818 euros), una cantidad de dinero conseguida entre la aportación del Concello de Pontevedra y la ayuda de la Diputación provincial.
En el año 1928 el Hospital Provincial pasó a manos de la Diputación y en 1996 fue transferido a la Xunta de Galicia.
Durante todos los años de su historia, su crecimiento se dio también a nivel infraestructuras. Y es que los defectos en las obras condicionaron un constante estado de reforma y ampliación. Esos defectos se han agravado en los últimos años, cuando han sido continuas las quejas por parte de usuarios y personal sobre la falta de espacio, aire acondicionado e incluso sillas para que los familiares puedan acompañar a los enfermos.
En el año 1903 se realizan las obras de la capilla y la galería del centro y en 1909 se ordena la rehabilitación del edificio tras su clausura temporal, tan solo una década después de su inauguración.
El hospital contó con ilustres directores, como Ángel Cobián Areal, Celestino López de Castro, Manuel Otero de Acevedo, Julián de la Villa Sanz, Joaquín Temes y Enrique Marescot, entre otros.
En la actualidad, el Hospital Provincial cuenta con una zona de consultas externas, extracción de sangre, urgencias pediátricas, maternidad, oncología y psiquiatría, entre otros servicios. Fue precisamente este el que registró el último gran susto vivido en el edificio, con un incendio provocado por una de las pacientes ingresadas el pasado mes de septiembre.
Usos sociosanitarios
En su momento, cuando se habló de la ampliación de Montecelo, se dijo que el viejo hospital se destinaría a usos sociosanitarios, como el ingreso de pacientes crónicos. El anuncio de la Xunta sobre esta residencia geriátrica ha sorprendido a los sindicatos, que consideran que era una de las cuestiones más importantes a incluir en el plan funcional que ya está redactando una comisión de expertos.
"El plan funcional sigue su rumbo. Hasta que no esté el Gran Montecelo ejecutado no se sabrá el uso exacto que se le dará al Hospital Provincial", aseguraron ayer fuentes del Sergas.
"Ha sido un anuncio inesperado, porque también se había hablado de hacer un PAC en condiciones, de destinarlo a salud mental y consultas que no requieran hospitalización... pero todo eran hipótesis", afirma, por su parte, Carolina Iñarrea, de la junta de personal.
