Tres procesados -dos mujeres y un varón- reconocieron ayer en la Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra haberle robado la cartera a una enfermera cuando esta se encontraba trabajando en el centro de salud San Roque de Vilagarcía y que después trataron de vaciar su cuenta bancaria.

Las letradas de la defensa y el fiscal alcanzaron un acuerdo de conformidad, en virtud del cual a cambio de reconocer la autoría de un delito continuado de estafa se les rebajó la petición de pena de cuatro años de cárcel y una multa de siete euros diarios durante diez meses a una condena de seis meses de prisión que podía ser sustituida por el pago de una multa, una opción que rechazaron los acusados. Algunos de ellos ya están actualmente en la cárcel por otra causa.

Los tres acusados admitieron que en febrero de 2011 aprovecharon un descuido de la enfermera para sustraerle la cartera de su bolso, que estaba colocado en una vitrina de la consulta de Pediatría. Días más tarde se dirigieron a una sucursal bancaria y utilizaron los documentos de la enfermera para extraer de su cuenta corriente personal 600 euros, previa simulación de la firma de su víctima. Cuatro días después,trataron de repetir la operación, pero con una cantidad mayor de mil euros pero fueron detectados por el personal del banco.