Más de 47.400 metros de nuevas canalizaciones, siete depósitos en cuatro municipios, con capacidad para almacenar 30.500 metros cúbicos de agua y casi cuatro años de obras. Son algunos de los parámetros básicos de la red de abastecimiento a toda la ría que la empresa pública Acuaes comenzó a ejecutar en abril de 2013.
Con una inversión de más de treinta millones de euros, ahora, a principios de 2017, se da "prácticamente por finalizada" la obra para suministrar hasta a seis municipios del litoral pontevedrés: la capital, Poio, Marín, Sanxenxo, Vilaboa y, de ser necesario, incluso Bueu, si bien este último municipio no se integró en el convenio con el que arrancó este proyecto.
Toda la red gestionará caca año más de 24,7 millones de metros cúbicos al año, lo que se traduce en la posibilidad de aportar a los más de 145.000 habitantes (muchos más en verano) una media de 67.842 metros cúbicos diarios.
La puesta en marcha de este complejo sistema todavía no es completo y acumula ya un notable retraso sobre el calendario inicial, que apuntaba a su estreno en el verano pasado. Acuaes señala que a día de hoy todas las obras "están finalizadas", pero aún falta la conexión de Vilaboa y Marín.
Según sus datos, la red en la margen derecha ya están en explotación desde hace meses. En concreto en Poio desde abril de 2015, desde mayo de ese año en Sanxenxo y desde septiembre de 2105 en Pontevedra. Sin embargo, en la orilla izquierda fue necesario realizar un proyecto propio, con modificaciones sobre el original, que retrasaron notablemente los trabajos. La demora también se debió a los obstáculos encontrados en Tomeza y Salcedo para atravesar las lineas del Eje Atlántico y de la AP-9.
Fase de explotación
Por ello, se asegura desde la empresa pública, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, que en esa orilla "las obras están finalizadas pero no han entrado en fase de explotación". Añade que "una vez superadas las pruebas de los depósitos, se firmarán las correspondientes actas de inicio de explotación con los concellos de Pontevedra (como origen de la red), Vilaboa y Marín".
De los 67.842 metros cúbicos diarios que se captarán del embalse del Pontillón y del río Lérez (conjuntamente en invierno y de forma individual según los regímenes de lluvia), más de la mitad corresponde a la capital, que absorberá más de 39.000 metros cúbicos (el 58%). Marín es el municipio que aparece en segundo lugar, con el 14% de todos los recursos. En su caso, Acuaes detalla que en este municipio "el abastecimiento depende únicamente de la arteria costera que, en caso de rotura, quedaría comprometido el suministro a gran parte de la población". Por eso se ha creado una "red mallada" que evita ese problema. Incluye también el depósito de Pardavila.
Sanxenxo podrá recibir del Lérez unos 8.100 metros cúbicos y Poio otros 6.539, lo que supone el 20% del total en conjunto. Para abastecer a ambos municipios se instalaron 17 kilómetros de nuevas canalizaciones, además de dos depósitos (Dorrón II y Buezas) y otras actuaciones complementarias.
Por último, Vilaboa (y en su caso Bueu), podrán recibir algo más de cuatro mil metros cúbicos. Este fase fue la última en ejecutarse ya que fue necesario habilitar una tubería desde el nuevo depósito de Mourente, con cambios en el trazado previsto. Además se ejecutaron dos depósitos, As Croas y O Picho.
El recinto de almacenamiento de Mourente puede acoger 3.000 metros cúbicos, pero el de mayor tamaño es el ejecutado en Lérez, al lado de la actual estación potabilizadora, que permitió multiplicar la capacidad de tratamiento.
