La portavoz nacional, Ana Pontón, lamentó ayer que el actual modelo de financiación autonómica perjudica a los concellos y, en el caso de Pontevedra, le hace perder más de cuatro millones de euros anuales.

La nacionalista explicó el modelo de financiación autonómica que propone el BNG en un acto abierto a la ciudadanía celebrado en Pontevedra. En sus palabras, consiste en "tener el control y la gestión total de todos los recursos de Galicia, vía impuestos o transferencias, y hacer cuentas con el Estado al final de cada ejercicio".

Con este sistema Galicia dispondría de 3.500 millones de euros adicionales que permitirían acabar con los recortes en servicios públicos y sociales y permitiría además "una autonomía real, única opción para avanzar", y garantizar "una convivencia entre iguales en un Estado plurinacional".

"Como no querer un concierto económico que nos daría 3.500 millones de euros adicionales con los que blindar nuestros servicios públicos y sociales?", se preguntó Pontón. En este sentido, recordó que este sistema permitiría aplicar una fiscalidad justa en la que paguen más los que más tienen. "Por supuesto, también defendemos el concierto por orgullo de país, porque confiamos en la capacidad de Galicia y no compramos la falsa idea de que vivimos de la solidaridad del Estado", destacó.

Este dinero que ahora se pierden, "acabaría con los recortes en sanidad, en educación, en la ley dependencia y en otros servicios sociales, y no habría necesidad de endeudarnos y soportar la sangría del pago de la deuda que, este año, se va a llevar 20 euros de cada cien de los presupuestos", indicó Pontón.

"Pacto de país"

Pontón instó al resto de fuerzas políticas a conformar un pacto de país en un tema clave como es el futuro modelo de financiación, "pero desde la confianza en las capacidades de Galicia?. "El concierto económico es la alternativa para las naciones que tienen voluntad política de serlo y para una convivencia entre iguales en un Estado plurinacional", argumentó.

En el caso concreto de Pontevedra, informó de que una simple operación aritmética revela que la ciudad del Lérez pierde con este reparto discriminatorio 4,12 millones de euros cada año. "Una ciudad como Málaga recibe el misma financiación que las seis ciudades gallegas con mayor población, lo que ejemplifica que los actuales criterios de reparto dejan Galicia muy mal parada", subrayó.