La Asociación pola Defensa da Ría (APDR) ha movido ficha en su batalla para impedir los planes de Ence para financiar la rehabilitación del pazo de Montero Ríos en la finca de Lourizán a cambio de ubicar allí su centro de I+D en materia forestal. Miembros de la directiva de la APDR fueron recibidos en la Diputación por Carlos López Font, persona en la que delegó la presidenta para este primer contacto con el colectivo ecologista. Un encuentro en el que la APDR transmitió al gobierno provincial sus "temores por el futuro del pazo de Lourizán" dado que se trataría de ubicar en él un centro de carácter privado, "dirigido exclusivamente por la empresa, lo que supondría -en la práctica- la privatización de un bien del patrimonio público".

El colectivo aseguró que el diputado provincial les manifestó una "postura clara" sobre el convenio firmado en su día entre la Diputación y la Xunta para la cesión del pazo y la finca, un acuerdo que caduca en el año 2021. Según explican, les aseguró que "cualquier renovación del citado convenio -en el caso de que sea gestionado por el actual equipo de gobierno- será exclusivamente con la Xunta, cerrando así, a nuestro entender, cualquier posibilidad de que Ence se haga con las citadas instalaciones". Además, reclamaron que, de ser el caso, se incluya en la renovación del convenio las "cláusulas oportunas para impedir que la titularidad de la finca y el pazo de Lourizán siga siendo pública y sin interferencias de ninguna clase por parte de Ence o cualquier otra empresa".

Petición de reunión de Rueda

Por otra parte, el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, explicó remitió ayer mismo una carta a la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, en la que su departamento y Medio Ambiente proponen dos fechas para fijar un encuentro con el fin de hablar sobre el futuro del pazo de Lourizán.

La Xunta defiende esta propuesta para rehabilitar el pazo de Montero Ríos con la financiación de Ence dado que convertiría el inmueble en su centro de investigación y desarrollo en materia forestal y lo rehabilitaría "sin que se pierda la titularidad pública del edificio".

Después de varias semanas de reproches en los medios, Rueda apostó ayer por sacar de la "polémica" los "temas importantes", como es el caso de este proyecto, y aseguró que no habría "ningún problema" por reunirse en la propia Diputación.

A pesar de ello, lamentó que el ente provincial no aceptase la presencia de ningún representante de Ence en el encuentro, apuntando que las administraciones públicas deben recibir a empresas privadas "cuando son proyectos de interés público". "De verdad que lamento, y quiero que se entienda, que no puedan estar los principales promotores del proyecto ENCE en esa reunión", señaló, dado que los responsables de la Xunta harán "simplemente de transmisores".