Si 2016 ha sido un año cargado de éxitos para el sector turístico de la comarca, los empresarios quieren despedir el ejercicio con un nuevo "regalo": el Fin de Año, una jornada en la que los hoteles de la provincia, sobre todo en el sur, han detectado un aumento de las reservas, en especial con la llegada de visitantes de Portugal, que eligen Pontevedra como escenario para despedir el año. De hecho, viajar a otros destinos en Nochevieja y Año Nuevo es un fenómeno que no deja de crecer en los últimos años y también son numerosos los pontevedreses que cambian de año en Canarias u otros puntos.
En el caso de Vigo, se espera alcanzar una ocupación media de entre el 70 y 75%. El presidente de la Asociación de Hoteles de Vigo (Ahosvi), Jaime Pereira, resalta las buenas perspectivas para Fin de Año y reconoce que este 31 de diciembre será mejor que el de los últimos años, empañados por la crisis. Pereira explica que el repunte de clientes ha permitido a los hoteles una tímida recuperación de sus tarifas, que se habían desplomado en los últimos años lastradas por la baja demanda. Otro buen síntoma es que algunos establecimientos, especialmente aquellos que celebran cotillones y cenas, se han visto obligados a contratar refuerzos.
Este repunte también se observa en las casas de turismo rural de la provincia, establecimientos donde son más frecuentes los encuentros familiares en estas fechas y que este año registran también reservas.
En la capital
Por su parte, el presidente de los hoteleros de Pontevedra, José María de Cabo, admitió ayer que "es habitual que en Fin de Año" crezca la demanda con respecto al resto del mes de diciembre, si bien en este caso este tramo final del año se ha sumado a la bonanza de todo el ejercicio. "No nos podemos quejar y después de un año francamente bueno, lo que ocurra este fin de semana no será muy significativo".
Por ello, De Cabo no realizó esta vez un sondeo entre los demás establecimientos de la ciudad, pero sí reconoce que en su hotel se puede superar el 70% de ocupación, si bien "en mi caso hay más clientes nacionales que portugueses" . De hecho, el turismo luso bajó los dos últimos años de forma notable, aunque esta vez se detecta un repunte.
Para el responsable de Ahosvi en Vigo, las buenas perspectivas de Nochevieja se deben a dos razones. La primera, el primaveral parte meteorológico para los próximos días -con sol y temperaturas máximas de 17 grados-, que anima a los clientes a salir de sus casas. La segunda, clave, es la paulatina recuperación del turista portugués tras varios años prácticamente desaparecido debido a la dura recesión económica que sacudió el país vecino.
En todo caso, el sector encuentra alguna pega a esta Nochevieja, y es que cae en sábado, lo que implica que los clientes solo pasan una noche en la provincia. De Cabo coincide en este análisis pero insiste en que todo se compensa con los resultados de todo el año. Al respecto, César Sánchez-Ballesteros, presidente de la Asociación de Empresarios del Hospedaje de la provincia de Pontevedra (Asehospo), señala que las estancias en ortos años eran más largas porque el día 31 caía en viernes, con lo que los clientes optaban por prolongan un poco más sus visitas.
"La ocupación será alta, pero estarán menos tiempo que otros años", anota Sánchez-Ballesteros. Sobre las tarifas, señala que los precios siguen "más bajos", a pesar de que en los últimos años diferentes rankings los situaron entre los más bajos de toda España.
