El BNG ha logrado aprobar inicialmente el presupuesto municipal de 2017 durante el mes de diciembre pero su entrada en vigor efectiva no será posible el 1 de enero próximo. Todavía es necesario exponer el documento al público para formular posibles alegaciones y es en este punto donde sin duda el PP y el PSOE presentarán sus primeras reclamaciones, a la espera de unos hipotéticos recursos judiciales al entender que la convocatoria del pleno del pasado viernes fue irregular.

Esa exposición al público se prolongará al menos un par de semanas y después deben resolverse de nuevo en el pleno, por lo que todo apunta a que hasta finales de enero, como muy pronto, no estará resuelto este trámite.

Con respecto a los posibles recursos judiciales, el gobierno local cree que "no hay base" para ello y de hecho, tanto el PP como el PSOE no ocultan sus dudas sobre la eficacia de esa vía, tanto por el tiempo que se puede demorar como por el problema que puede suponer para el concello.

De este modo, el gobierno local se prepara para manejar desde febrero los 73 millones de este presupuesto aprobado "in extremis" gracias a la abstención de Marea y que cuenta con unos 13 millones en inversiones. Una de las obras "estrella" será la rehabilitación y peatonalización del puente de O Burgo.