Aunque la aprobación del presupuesto, gracias a la abstención de Marea, obliga a PP y PSOE a variar su estrategia inicial contra al BNG, los dos partidos admiten que este acuerdo "in extremis" entre el gobierno local y la formación de Luís Rei "no nos sorprende". Jacobo Moreira señala ahora que "no lo descartábamos ante las presiones de Luis Villares, Martiño Noriega y Ana Pontón", portavoz parlamentario de En Marea, alcalde de Santiago y líder del BNG respectivamente. Añade que Rei ya acudió al pleno con "un discurso preparado y las declaraciones previas de Lores ya nos despejaron las dudas".
Eso sí, el PP se pregunta ahora qué postura adoptará ahora Marea cuando se debatan asuntos contra los que se pronunció abiertamente en contra (convenio de la plaza de toros o concurso del agua y la basura, por ejemplo) y "que aparecen reflejados y aprobados en un presupuesto que acepta".
De la misma opinión es Agustín Fernández, que también habla de "presiones al más alto nivel en las que Marea Pontevedra no decidía nada". Tanto el portavoz del PSOE como el del PP coinciden en ironizar sobre este "acercamiento" entre Marea y BNG: "Vuelven a casa por navidad".
