Desde hace semanas la antigua vía del ferrocarril, en el tramo comprendido entre Vilagarcía y Portas, luce ya sin maleza, ramas y árboles y buena parte ya está desmontada gracias a la reciente cesión del trazado por parte del Ministerio de Fomento para su futura conversión en senda peatonal. La vía llevaba años sumida en el abandono y olvidada por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y su lamentable estado, llena de tanta vegetación que incluso generaba riesgo de incendio, provocó constantes quejas. La última limpieza parcial acometida por el Adif data de 2014 y desde entonces no se había ejecutado ninguna otra actuación de conservación.