Uruguaya de nacimiento, gallega de adopción. Soledad Felloza es una persona polifácetica. Actriz, escritora y cuentacuentos. Es una habitual colaboradora de la red de bibliotecas de Galicia tratando de enganchar a las nuevas generaciones a la lectura. Ayer, aprovechando que era el día de las bibliotecas, estuvo en la de Caldas de Reis, donde un grupo de niños disfrutó con sus historias narradas sin mayor arma que la palabra y la voz.
-Día de las bibliotecas y, de entre todas, usted está en la de Caldas de Reis.
-Llevo muchos años trabajando en la red de bibliotecas de Galicia. Soy asidua de muchas de ellas y de entre todas, Caldas es una de las más activas en cuanto a actividades. Tiene una gran programación.
-¿Cómo de importante es el papel de personas como usted a la hora de fomentar la lectura?
-Los cuentos dan vida. Transmiten valores, pero el principal valor es la escucha. Mantienen viva la palabra y la identidad. Si se puede generar interés a través de cuentos, mejor.
-Una vez acaba su narración, ¿es consciente de si ha conseguido levantar interés para que sus oyentes sigan leyendo?
-Los niños van a la biblioteca directamente con el carné para coger cuentos. Las historias son de una hora más o menos y no se distraen. Les encantan además las historias narradas de voz, nada de disfraces. Es la palabra pura y tenemos una atracción por ella ancestral. Hay dentro de nosotros una necesidad de seguir usándola.
-Pero, ¿es consciente de que no corren buenos tiempos para la lectura?
-La lectura está eternamente en crisis, pero soy optimista. Estamos cambiando los formatos, aunque el libro sigue siendo el objeto preferido para leer. Estamos en una etapa en la que hay que enseñar a los niños a decodificar para que hagan una buena elección de sus lecturas.
-Entonces, las bibliotecas seguirán siendo fundamentales.
-Por suerte, tenemos una red pública de bibliotecas de mucha calidad. Eso ayuda a paliar el efecto de la crisis y el IVA cultural, que es elevadísimo. Hay que hacer algo para bajarlo, porque daña muchísimo.
