A las puertas del juzgado de A Parda se concentraron durante la mañana de ayer los vecinos que a esas horas podían acompañar a Luis Argibay y Lourdes Pérez, y apoyarlos en el juicio por infracción urbanística. Entre ellos los miembros de la plataforma de afectados por la falta de PXOM en Vilaboa. Su portavoz, Tareixa Carro, incidía en que una condena a este matrimonio, propietario de una de las muchas casas perjudicadas por este problema administrativo, supondría "destrozar su vida, el proyecto vital de una pareja y sus dos hijos" que, por otra parte, "no tienen forma de hacer frente a la multa que se les pide, ni a pagar un alquiler ni construir otra casa en otro lugar", explica esta portavoz vecinal.

Por eso tanto la plataforma de afectados como los vecinos y amigos de los acusados piden "que prime el sentido común" para impedir el derribo de una vivienda que "dentro de unos meses estará legalizada por el nuevo plan xeral" que, como recordaron, cuenta ya con aprobación inicial y está a la espera de la definitiva.

Sin embargo, el fiscal indicó en sus conclusiones que la ley a la hay que atenerse es la vigente, es decir, las normas subsidiarias en vigor, y no ninguna norma que se pueda aprobar en el futuro.

El fiscal sostiene además que los acusados actuaron conscientemente y que, por eso, no quisieron pedir licencia urbanística cuando debieron hacerlo, "sabedores de que no se le iban a dar".

El ministerio público entiende, respecto a la construcción del tejado con el que la defensa trata de fijar la finalización de la obra, que esta circunstancia no determina que la construcción esté concluida y que es un hito más de la construcción.

En sus conclusiones finales, el fiscal añadió -a la petición de cárcel y multa- la inhabilitación especial para ejercer el oficio de promotor inmobiliario o constructor durante el tiempo de la condena.