Un esqueleto del siglo I, posiblemente de una mujer joven y en "excelente" estado de conservación. Es el último hallazgo localizado en el yacimiento del Campo da Lanzada que en la jornada de hoy es testigo del levantamiento de los restos que el equipo de arqueólogos ha bautizado como Cornelia. Así lo detalló la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, que visitaba esta mañana la zona acompañada de los responsables del estudio Rafael Rodríguez es el coordinador- y del alcalde de Sanxenxo, Gonzalo Pita.

La intervención que se lleva a cabo en el asentamiento galaico-romano ya ha sacado a la luz más de 3.000 piezas. El ente provincial ha destinado 262.000 euros a los trabajos que pretenden dar valor al entorno -en un protocolo conjunto con Fomento-. El esqueleto es el primero que aparece en la zona desde la década de los 60-70 del siglo pasado. 'Cornelia" sería una mujer "que realizaba actividad física intensa". A partir de su análisis detallado "podremos conocer cómo se alimentaban nuestros antepasados, qué tipo de parásitos o enfermedades padecían, presencia de metales...". Por su parte, Gonzalo Pita se mostró convencido de que el Campo da Lanzada "se vai converter nun dos atractivos turísticos máis importantes da comarca".

Arqueólogos trebajan en los restos del esqueleto hallado en A Lanzada. //Gustavo Santos

El arqueólogo de la Diputación de Pontevedra resalta que este hallazgo "supone la confirmación de la extensión de la necrópolis galaico-romana hasta el área de ocupación, al lado de las viviendas" y que, añade, "nos permitirá contar la historia de las gallegas y de los gallegos, ponerle cara a las y los protagonistas reales de lo que aconteció en este territorio". Ademais, Rafael Rodríguez subrayó que el estudo que se llevará a cabo en Santiago "permitirá datar el esqueleto y determinar si pertenece a la etapa prerromana o romana".

A Lanzada, como informa la Diputación, es un asentamiento fundamental para conocer el mundo de la Edad de Hierro en el noroeste peninsular, desde el que se desenvolvían actividades comerciales de gran envergadura, conectando esta zona con puntos del Mediterráneo tan distantes como Palestina, Italia o Tunisia. También en este yacimiento se encontraron vestigios que permiten situar la primera factoría de salazón del noroeste peninsular.

El yacimiento arqueológico de A Lanzada. //Gustavo Santos