La revitalización del Mercado de Abastos, para poner freno al declive de los últimos años, se ha convertido en una de las asignaturas pendientes del gobierno local, que en varios mandatos ha manejado planes al respecto desde que el recinto reabrió sus puertas, totalmente remodelado, en octubre de 2003. El Concello ha ideado ahora un nuevo plan para la modernización de la Plaza, cuyo primer paso se dará en el pleno de este mes, con la asignación de cien mil euros para una fase inicial de reformas. El eje de este proyecto es otorgar nuevos usos a la planta alta, prácticamente vacía. Y ya está decidida una primera actividad. Se trata de una ludoteca infantil, no solo para atender a los hijos de los clientes durante las compras, sino también para su aprovechamiento fuera de las obras de funcionamiento del Mercado.
Para ello, el primer objetivo es "aislar" ese primer piso y permitir el acceso desde la calle sin necesidad de abrir todo el edificio. Así, en el pleno de este mes se habilitará una partida de 100.000 euros para instalar, entre otras obras, unas rejas móviles para cerrar la parte de abajo, donde se encuentran casi todos los puestos y casetas, y establecer una entrada independiente para la planta alta. La modificación de crédito ya ha sido aprobada por el gobierno local y debe ahora superar el filtro de toda la corporación.
Baños adaptados
Pero además de este plan, el gobierno local tiene sobre la mesa otra actuación más ambiciosa, para la que se tramita incluso ya ayuda de la Xunta. Se trata de crear una auténtica "imagen corporativa" de todo el mercado de modo que se disponga de una marca identificativa que sirva para divulgar la calidad de los productos que se venden en él.
La actuación, donde se incluye la creación de esa ludoteca infantil en la planta alta, va mucho más allá, puesto que incluye la reforma de los baños de ese mismo piso, de modo que sean de accesibilidad universal (la Plaza dispone de ascensores desde su reforma de 2003), la mejora de la iluminación y otras obras de modernización.
Todo este proceso se puede ejecutar después de que la anterior concejala Carlota Román hubiera regularizado las concesiones, lo que permitió sacar a subasta los numerosos puestos vacíos, una proceso que no dio resultado pero que sí puso de manifiesto que la planta alta del mercado de la calle Sierra está prácticamente sin uso y sin demanda. Desde entonces se busca un destino para ese amplio espacio, sin avances significativos.
Hace unos meses se puso el foco en una convocatoria de fondos europeos significa una nueva oportunidad para destina un amplio apartado de 1,7 millones de euros al respecto. Una de las ideas del gobierno local era poner en marcha un mercado de nuevos creadores en arte, artesanía, diseño y moda, vinculado a las titulaciones del campus universitario, que se ubicaría en la planta alta, al igual que un "espacio lúdico-gastronómico" ideado por la Concejalía de Promoción Económica que dirige Anabel Gulías, que bautizó este espacio como "food lab market". Sin embargo, desde que en enero se presentó la candidatura a esos fondos de Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (DUSI), el Gobierno central aún no ha resuelto el concurso, lo que obliga a buscar vías alternativas.
