La Policía Nacional investiga un presunto caso de intento de agresión sexual que se produjo a plena luz del día y en una céntrica calle de Pontevedra, en el barrio de San Roque. En los calabozos de la Comisaría permanece detenido un joven de 20 años de edad como presunto autor de los hechos mientras que los agentes completaban las diligencias abiertas en torno a este suceso. La víctima es una mujer de 49 años.

Todo ocurrió al filo de la una de la tarde. Según algunos testigos que se encontraban en el lugar del suceso a esa hora, de repente comenzaron a escuchar gritos de auxilio y socorro procedentes de la Rúa do Rache, un pequeño callejón que conecta la calle Hermanos Nodales con la avenida de Corbaceiras en Orillamar, al lado de un conocido restaurante. De hecho, los camareros del establecimiento hostelero y algunos clientes se cuentan entre las personas que escucharon los gritos de auxilio que al principio confundieron con el ruido de unos niños que suelen jugar en el callejón. Pronto observaron que realmente eran gritos desesperados de socorro de una mujer.

Los testigos aseguran que algunas de las personas que llegaron en primer al lugar del suceso al acudir en respuesta a estas llamadas de auxilio se encontraron a la víctima, esta mujer de 49 años de edad, tirada en el suelo y que el supuesto agresor emprendía la huida en ese momento por Orillamar, en dirección hacia el puente de A Barca. No llegó tan lejos. La agresión se produjo a una hora en la que había mucha gente en las inmediaciones por lo que fueron varios los ciudadanos que escucharon el revuelo y se produjeron varias llamadas simultáneas a la Policía Nacional y Local (en algunas inicialmente se hablaba de un posible robo pero luego ya confirmaron que se trató de una tentativa de agresión sexual). Al mismo, tiempo, parece ser que la colaboración ciudadana fue fundamental para que el presunto autor de los hechos no pudiera llegar muy lejos y fue interceptado a escasos quinientos metros, gracias a dos vecinos que al parecer colaboraron para retenerlo hasta la llegada de los agentes de la Policía Local y Nacional.

Según los hechos que investiga la Comisaría, el atacante supuestamente se habría abalanzado sobre la mujer en este callejón y la habría sometido a tocamientos de todo tipo mientras intentaba agredirla sexualmente, sin llegar a conseguirlo. Según manifestaron algunos vecinos en el lugar de los hechos, incluso habría llegado a romperle la ropa interior a la víctima. Al parecer, el hombre se mostró muy agresivo y violento en su ataque.

Estaba “muy asustada”

Los testigos del suceso explicaron que la víctima es una mujer que suele aparcar su vehículo en esa zona cada día y que se encontraba muy afectada por lo sucedido. “Estaba realmente asustada, después de la agresión una vecina se la llevó a su casa para intentar calmarla a la espera de que llegase la Policía”, “estaba muy mal”, explicaban vecinos de la zona y trabajadores de un establecimiento hostelero cercano. De hecho, fuentes de la investigación confirmaron que la mujer tuvo que ser trasladada a Montecelo para ser explorada y como consecuencia del estado de nerviosismo en el que se encontraba.

El presunto autor de los hechos permanece a la espera de que los agentes completen las diligencias antes de ser puesto a disposición judicial.

Este es el segundo ataque de índole sexual a una mujer que se produce en la ciudad en las últimas semanas dado que un pontevedrés fue detenido durante las fiestas de La Peregrina por supuestos abusos a una menor a la que abordó en la zona en la que se montan las casetas de feria en la Alameda y Reina Victoria.